(Agustí Solà)
Receta: Sardinas rebozadas con salsa tártara
Ingredientes (para 4 personas):
500 gde sardinas
2 huevos
1 lata de mayonesa
50 gde pepinillos en vinagre
1 cebolla tierna
1 cucharada de mostaza
1 cucharada de alcaparras
Harina
Aceite
Sal
Elaboración:
Limpiamos bien las sardinas y separamos los lomos, desechando la espina central, procurando quitarle todas las pequeñas espinas y que queden los filetes lo más limpios posible
Ponemos un poco de sal, los pasamos por harina y huevo y los freímos en abundante aceite caliente.
Picamos la cebolla, los pepinillos y las alcaparras, lo mezclamos con la mayonesa y la mostaza.
Servimos las sardinas acompañadas con la salsa.
Juego: La sardine (la sardina), Francia
Edad: apartir de los 6 años
Nº de jugadores: de 5 a 10
Duración: indeterminada
Lugar: exterior (cuanto más variado sea el terreno, más divertido e interesante resulta el juego)
Educa: El dominio del espacio y del propio cuerpo
Materiales: no son necesarios
Desarrollo y reglas:
El juego consiste en encontrar al jugador escondido, “la sardina”. Cuando la sardina ya se ha escondido, el resto de los niños salen a buscarla, cuando un niño la encuentra, se tiene que agachar a su lado sin hacer ruido y a ser posible sin que los otros jugadores lo vean.
El último niño que descubre la sardina, ocupa su lugar en la próxima partida
Receta: Ensalada de garbanzos [1]
Ingredientes (para 4 personas):
450 gde garbanzos cocidos
1 pimiento verde
1 pimiento rojo
4 cebollas tiernas
2 tomates para ensalada
Aceite
Vinagre
Sal
Elaboración:
Lavamos y cortamos a dados pequeños los pimientos y el tomate. Pelamos y cortamos las cebollas
En un bol, mezclamos los pimientos, el tomate, la cebolla, lo aliñamos todo con el aceite, una pizca de sal y unas gotas de vinagre
Incorporamos los garbanzos cocidos y lo removemos bien para que se mezclen todos los sabores, lo dejamos reposar un rato antes de comerlo
Juego: Sacos de legumbres
Edad: a partir de los 6 – 8 años
Nº de jugadores: máximo 10
Duración: unos 15 minutos
Lugar: espacio amplio
Educa: la coordinación de movimientos, el equilibrio corporal y el concepto de ayuda al compañero
Materiales: tantos saquitos de legumbres como participantes
Desarrollo y reglas:
Los participantes se ponen encima de la cabeza uno de los saquitos y van moviéndose siguiendo un ritmo determinado, caminando, saltando, etc.
Si el saquito se cae al suelo, el niño que lo llevaba se queda “congelado” y no puede volver a moverse hasta que un compañero no se lo vuelva a poner encima de la cabeza.
Los niños no pueden aguantar los saquitos con las manos.
Receta: Coca de azúcar
Ingredientes:
800 gde harina
350 gde azúcar
400 gmanteca
4 huevos
La piel rallada de 1 limón
Elaboración:
Mezclamos bien en un bol: el azúcar, las 4 yemas de huevo y la piel rallada de limón
Añadimos la harina a poco a poco, sin dejar de remover hasta que obtengamos una masa fina y homogénea
Estiramos la masa y la dejamos de un grosor de ½ centímetro. Untamos una bandeja de horno con un poco de mantequilla y harina, ponemos la coca encima y la espolvoreamos
con azúcar
Horneamos unos 30 minutos a 170 grados
Juego: La coqueta de sucre (La coca de azúcar)
Edad: a partir de los 5 años
Nº de jugadores: mínimo 10
Duración: entre 10 y 20 minutos
Lugar: exterior
Educa: favorece el trabajo de todo el cuerpo mientras se sigue el ritmo de la canción
Materiales: no son necesarios
Desarrollo y reglas:
Se colocan los niños de pie en un círculo cantando la canción “La coqueta de sucre”, la idea es que el adulto o uno de los niños introduzca en la canción el nombre del niño que quiere que baile.
Éste, al oír su nombre, va dando vueltas al círculo mientras sigue el ritmo, haremos lo mismo con todos los niños
La canción dice:
“Quien bailará la coqueta amb sucre
Quien la baile será muy espabilado
Báilela usted señorito/a…(nombre del niño/a)
Báilela usted que bailará bien“
Variante:
El baile se puede ir variando: saltando a la pata coja, ir hacia atrás, etc
Curiosidades sobre los garbanzos
El garbanzo es una leguminosa, de la familia de las fabáceas, que generalmente no supera los 50 cm de altura, sus flores, de color blanco, forman unas vainas, que es donde se generan las semillas, estas vainas, contienen entre 2-3 semillas como máximo.
La palabra garbanzo, seguramente proviene del vocablo arwaits que seguramente derivó a arvanço y de aquí al garbanzo actual.
Aunque su origen no es muy claro, seguramente se empezó a consumir en la zona del Mediterráneo Oriental, donde pasó con rapidez a toda la cuenca mediterránea, Asia Central, el subcontinente Indio, y el norte de África, con el descubrimiento de América, esta legumbre fue llevada a este nuevo continente.
Originariamente, se consideraba al garbanzo, como un producto consumido por las clases populares y pobres. Aunque en la actualidad esto ya no es así y se pueden encontrar en las cartas de muchos de los mejores restaurantes mundiales.
El garbanzo en sí mismo es redondeado, aplastado por los laterales y posee un pico formado por el relieve de la raicilla.
Variedades y curiosidades:
Aunque existen infinidad de variedades de garbanzos, estas son algunas de las más conocidas e importantes. El tipo Desi de grano pequeño, amarillento o negro con formas angulosas. Se cultiva principalmente en la India. El Gulabi con grano mediano, liso y redondeado. El Kabuli de grano medio o grande, redondeado y arrugado.
En muchas culturas antiguas, se asociaba el garbanzo con la muerte , los griegos comían garbanzos en los banquetes fúnebres, en la región de Niza, la tradición establece comerlos el miércoles de Ceniza, el Viernes Santo y el día de todos los santos. En España también existe una tradición similar donde el Viernes Santo se acostumbra a comer un potaje de garbanzos.
El garbanzo es un ingrediente importante en la dieta mediterránea, en la antigua Roma, ya gozaban de un considerable fama, donde se vendían en la calle, se consumen de diversas formas, ya sean hervidos, cocidos, tostados, e incluso como infusión, hay zonas que se prepara una bebida con los garbanzos tostados y molidos.
Los garbanzos se venden de diferentes formas: cocidos, en remojo, crudos, al comprarlos tenemos que fijarnos que estén bien secos, enteros y de un color uniforme
Los garbanzos se conservan mucho tiempo y una vez cocinados pueden ser congelados por muchos meses. Si se ponen a remojo, los granos deben estar en una vasija con agua fría y una pequeña cantidad de sal, entre doce y veinticuatro horas, dependiendo del tipo y el tamaño de grano
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