Atún, Mercurio Y Toxicidad: Nota Informativa de la Aesan

Nota informativa de la AESAN sobre mercurio y metil-mercurio en productos pesqueros

Mayo 2008

La Dirección Generalde Sanidad y Consumo (DGSANCO) de la Comisión Europea ha publicado una

nota informativa (en inglés) sobre “Metil-mercurio en pescado y productos pesqueros”; esta nota

es una actualización de la ya publicada en mayo de 2004

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) publicó en febrero de 2004 la

“Opinión (en inglés) del Panel Científico de Contaminantes en la Cadena Alimentaria sobre una

petición de la Comisión relacionada con el mercurio y metil-mercurio en productos alimenticios”.

El contenido de esta nota va dirigido a hacer recomendaciones al consumidor, en particular a

ciertos grupos de riesgo como son los niños o las mujeres embarazadas.

El mercurio como tal, en su forma inorgánica, es poco tóxico, mientras que su forma metilada posee una

elevada toxicidad, se disuelve fácilmente en la grasa y atraviesa la barrera hemato-encefálica y la placenta.

El mercurio puede provocar alteraciones en el desarrollo neuronal del feto y en niños de corta edad.

Esta forma orgánica del mercurio puede llegar a suponer hasta un 90% del mercurio total presente en los

pescados y en los productos de la pesca. Como consecuencia de la contaminación del medio ambiente, los

peces pueden acumular mercurio, sobre todo los grandes depredadores ya que estos van acumulando el

mercurio por la ingesta a lo largo de su vida. El hecho de que estos grandes depredadores suelen ser

migratorios, hace que no sea posible excluir los pescados de las aguas más contaminadas.

No obstante, la AESAN no considera que el consumo de pescado suponga un riesgo para la población, ya que la ingesta de metil mercurio del pescado no supera la ingesta diaria admisible definida por la Organización Mundial de la Salud. El pescado es, en términos de alimentación saludable, una parte importante de la dieta. Esto se debe, básicamente, a la calidad de su proteína y su grasa, con aminoácidos esenciales en cantidad más que adecuada, escasa cantidad de grasas saturadas y una importante proporción de ácidos grasos omega 3.

Únicamente se recomienda precaución a las mujeres embarazadas o que puedan llegar a estarlo, mujeres en fase de lactancia y a niños de corta edad (entre 1 y 30 meses): Consumir una amplia variedad de pescados, evitando consumir muy asiduamente las especies más contaminadas (p.ej. pez espada y tiburón), cuyo consumo debe limitarse a una ración semana

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