Cristóbal Muñoz: Premio Promesas de la Alta Cocina

La sede de "Le Cordon Bleu" en España, se encuentra en la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid. Esta prestigiosa escuela, cuenta con más de 100 años de experiencia en la enseñanza de gastronomía, hostelería y gestión. Para muchos es el mejor instituto de artes culinarias del mundo.

Los graduados en esta escuela, cuentan con un título que los distingue en este competitivo mundo. Cuentan con unos 80 chefs prestigiosos, algunos de ellos con estrellas Michelin, que no solo son profesores, sino fuente de inspiración y un apoyo para los alumnos. Imparten licenciaturas, máster y programas MBA, que acreditarán su capacidad en esta profesión. Los cursos son adaptados frecuentemente a las necesidades de la industria gastronómica, a través de las nuevas tecnologías.

Le Cordon Bleu ha organizado por primera vez, el certamen jóvenes promesas en su sede de Madrid, siendo el ganador el mencionado Cristóbal Muñoz. Este estudiante del Instituto Almeraya de Almería, recibió como premio una beca para estudiar una diplomatura en la prestigiosa escuela, valorado en 21.000 euros.

Recogió el premio de manos de Martín Berasategui, presidente del jurado, compuesto también por el presidente de la Academia Madrileña de Gastronomía, Miguel Garrido, la periodista Rosa Rivas y tres chefs profesores de la escuela.

En la final, los diez aspirantes durante cuatro horas, elaboraron el mismo plato, cada uno a su manera. Se evaluaron la calidad técnica, la originalidad, la presentación y la exposición de los platos.

Los diez aspirantes, seis chicos y cuatro chicas, tenían que tener menos  de 25 años y cursar el último año de formación  de cocina o pastelería, en escuelas españolas.

Se evaluaron las distintas interpretaciones del mismo plato: solomillo de ternera con guarnición de verduras, patatas y salsa bordelesa. Con este plato tradicional tenían que jugar los concursantes, para conseguir algo original y bien elaborado, que llamase la atención y ese fue el reto de Cristóbal, que consiguió alzarse con el galardón con un original y bien resuelto solomillo.

Cristóbal obtuvo el premio con su plato, titulado por él, “Esencia y tradición”. El plato arriesgado y con una ejecución fluida, evocaba los sabores de la gastronomía española, francesa y japonesa, cocinas que admira.

Este joven que iba para maestro, entró por casualidad en el mundo de la cocina y ha realizado prácticas en el restaurante Calima de Dani García. Es un gran admirador de Joan Roca y un gran lector de libros gastronómicos, le fascina también Michel Bras.

Al recibir el premio de manos de Berasategui se desató la emoción y no pudo reprimir las lágrimas cuando lo recibió de manos de otro de sus ídolos.

El segundo premio fue para Víctor Ayoso, del I.E.S. Escuela de San Roque de Cádiz, estudiante de restauración en Málaga, otra joven promesa de 19 años, que sin duda dará que hablar al igual que Cristóbal, en el futuro.

Ayoso recibió como premio una beca, para estudiar un certificado en cualquiera de las disciplinas de le escuela.

Berasategui animó a los participantes que no habían recibido premio, recordándoles que el también fue novato, pero con esfuerzo, tenacidad y sobre todo mucha ilusión, se pueden conseguir metas elevadas.

Cristóbal, a su vez declaró que el esfuerzo había valido la pena. Conseguir llegar a Madrid para participar en el certamen, ya fue todo un logro.

Le Cordón Bleu también participa en la edición española de MasterChef y premiará con becas a los tres primeros clasificados, en el concurso televisivo.