Las sociedades gastronómicas y los txokos fueron creados a mediados del siglo XIX en Donostia con el objetivo de contar con un espacio dedicado al ocio y al buen comer y que, lejos de desaparecer, goza de muy buena salud. Más de un siglo después, este fenómeno se ha extendido por todo el planeta.
Algunas de ellas están relacionadas con actividades culturales, benéficas, musicales o deportivas. Todas ellas llevaron y llevan a cabo una gran aportación de estas entidades a la dinámica de su ciudad. En cualquier caso, una gran parte de ellas están fuertemente relacionadas con la cultura y la identidad vasca.
Las sociedades nos ofrecen todas las variantes gastronómicas que podamos encontrar: Cocinar lo cazado, mariscadas, alubiadas, semana del hongo, calderetes, trofeo al toro más jugoso, Jornadas de Verduras, concursos gastronómicos de rabo guisado, morcilla o bacalao, pero siempre provocan admiración por el alto nivel de los diferentes cocineros.
Ahora, un portal web (sociedadesgastronomicas.com) quiere hacer su pequeño gran homenaje a estas agrupaciones. Se presentó recientemente en la sociedad Vasconia, de San Sebastián, y contó con el apadrinamiento de Juan Mari Arzak, socio de seis sociedades
La labor ha sido dirigida por Eduardo Aguirre en colaboración con un grupo de profesionales del diseño y la programación, donde figuran un total de 1.480 sociedades.
Los textos informativos provienen del libro Sociedades populares (1870-2006) de Rafael Aguirre, al igual que las fotografías, algunas del siglo XIX, y desvelan cualquier tipo de duda y ofrecen respuesta a los interrogantes planteados sobre el origen y evolución de estas agrupaciones.
Las sociedades son salvaguarda de la cocina hecha con mimo, según Arzak. Durante la presentación del portal, en la sociedad Vasconia de Donostia, el cocinero Juan Mari Arzak, que avaló la iniciativa, señaló que las sociedades «son parte de nuestro ADN». Arzak remarcó que las sociedades se han convertido en una pieza clave para la supervivencia de la cocina de calidad y hecha con mimo, descuidada debido al modo de vida actual. «El hombre, por gusto y afición, puede elaborar recetas lentas y elaboradas que a la ama de casa le llevarían demasiado tiempo y al restaurador no le serían rentables», explicó. «Además, la cocina de las sociedades es un paradigma de la sencillez, de la reivindicación de la materia prima».
Buscadora de cosas ricas, ya sean desayunos, comidas o meriendas. Por los Madriles y alrededores. Y productos. Que no todo es salir, a veces cocino en casa.
Se formó en la escuela de hostelería de la Casa de Campo en Madrid del 1992 al 1995. Tras graduarse empezó su trayectoria profesional como 2º de cocina en el restaurante Paradis (1995-1997).
Cocina Hermanos Torres is accoladed with two stars by Guide Michelin, a maximum three Repsol Suns by the most important Spanish dining guide and a green Michelin star for their sustainable efforts.
Incluir en su carta recetas de nuestros mayores, revisadas con su instinto creativo, conservar los sabores y comidas de nuestra huerta y de cocinar con productos tradicionales, le ha servido para convertir a Almoradí en un referente comarcal a nivel gastr