Para quien le gusta el juego y la vida nocturna intensa, Las Vegas es el paraíso. Hace unos cinco años trataron de convertir a la ciudad del pecado o ?Sin city? como se le conoce en todo Estados Unidos, en un destino turístico más familiar, pero les falló y los turistas disminuyeron, por lo que de inmediato retomaron el camino pecaminoso, que no es que sea inmoral. En cualquier lugar del mundo hay ?Night clubs? idénticos, lo diferente es que aquí hay muchos juntos, han invertido mucho dinero y los espectáculos son tan grandiosos, como la majestuosidad de sus luces los anuncian.
En cuanto a los restaurantes, la oferta es enorme, como en ninguna otra ciudad del mundo. Cada hotel tiene por lo menos cuatro o cinco con distintos tipos de comida o temáticos que llaman restaurantes para comidas ?casuales?, lo que suena a algo sencillo y ligero, sin embargo tanto los platillos que ofrecen como el tamaño de las porciones, no tienen nada de casual. ¡Un sándwich de prime rib puede tener suficiente carne como para que coman dos o tres!
Para el ?dinner?, la oferta pasa por los bufets, que son espectaculares y opulentos, porque además de ofrecer una gran diversidad de platillos, utilizan productos e ingredientes de primera calidad. Así, encontrará cangrejo de Alaska o Prime rib, en un buffet de 30 dólares.
También en cada hotel hay cinco o siete restaurantes de renombre, ya que el patrón a seguir por los chefs después de volverse famosos en Nueva York o San Francisco, es abrir un restaurante en Las Vegas. Y son muy felices porque ahí pueden gastarse cualquier cantidad de millones de dólares en decoración y extravagancias, para estar a tono con la ciudad.
Thomas Keller tiene el restaurante Bouchon en The Venetian, donde también está el Tao; en el Cesar Palace está el Mesa grill de Bobby Fly y también el restaurante de Bradley Ogden. En el Bellagio el Olives de Todd English, Michael Mina con sus mariscos y pescados y Le Cirque. En el nuevo hotel Wynn está Okada con su oferta franco japonesa y también la Brasserie de Daniel Boulud. El multiestrellas Alain Ducasse abrió el Mix en el Mandalain, sólo por mencionar unos cuantos.
Los turistas por lo general día y noche visten shorts y camiseta, aún en los restaurantes elegantes. A muchos se les ve cansados y van por ahí arrastrando los pies... y es que para conocer Las Vegas, hay que caminar mucho, subir y bajar puentes aunque tengan escaleras eléctricas en las calles... y eso cansa mucho. Ni que decir del juego, perder un dólar, cien o miles puede resultar agotador.
Y contrario a lo que sucede en casi todos los Estados Unidos, fumar en Las Vegas, no está prohibido, de hecho en algunos hoteles y restaurantes los aislados en secciones especiales son los ?no fumadores?, ¿Será que los que fuman, son los que más gastan en maquinitas tragamonedas y mesas de juego?
Publicado en sección Gourmet de Diario Monitor México, 2 de junio 2006
Buscadora de cosas ricas, ya sean desayunos, comidas o meriendas. Por los Madriles y alrededores. Y productos. Que no todo es salir, a veces cocino en casa.
Se formó en la escuela de hostelería de la Casa de Campo en Madrid del 1992 al 1995. Tras graduarse empezó su trayectoria profesional como 2º de cocina en el restaurante Paradis (1995-1997).
Cocina Hermanos Torres is accoladed with two stars by Guide Michelin, a maximum three Repsol Suns by the most important Spanish dining guide and a green Michelin star for their sustainable efforts.
Incluir en su carta recetas de nuestros mayores, revisadas con su instinto creativo, conservar los sabores y comidas de nuestra huerta y de cocinar con productos tradicionales, le ha servido para convertir a Almoradí en un referente comarcal a nivel gastr