Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si acepta o continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información aquí (enlace a página de cookies).
1/3 de taza de pisco 1 clara de huevo 1 limón 50 gr. de azúcar 2 golpes de angostura 40 gr. de chuño canela para decorar
ELABORACIÓN
1.- En un bol añadir pisco y las claras a punto de nieve y comenzar a emulsionar.
2.- Seguido proceder a agregar en hilo el zumo de limón.
3.- Ponerle dos golpes de amargo de angostura y seguir emulsionando.
4.- Llevar a una cacerola, a fuego lento añadir chuño.
5.- Que se mezcle bien para no encontrar grumos y dejar que tome punto.
6.- Se puede presentar con canela espolvoreada encima una vez vertida la reparación en la copa, tener cuidado que la mazamorra esté a temperatura ambiente para no tener accidentes.
Reseña histórica: Este postre nace de una bebida Nacional Peruana, el pisco juega un rol importante en nuestras vidas, aquí lo llevamos a un postre tratando de seguir teniéndolo en mente revalorando costumbres peruanas.
Me considero un cocinero de producto, por lo que intento basarme en una cocina de mercado con un gran predominio del humo y la brasa; Con una base tradicional, pero combinándola con técnicas un poco más vanguardistas. Me gusta trabajar con buen producto y
DIEGO GALLEGOS: Una cocina creativa, singular y sostenible. Una materia prima única y de máxima calidad, producida mediante acuaponía. Una propuesta gastronómica basada en pescados de río y vegetales de producción propia y artesanal. Un sistema inno
“Alguien que ama su historia gastronómica y que ha hecho todo lo posible para darla a conocer a todas las personas que se han acercado a nuestros restaurantes”
: La cocina produce muchas sensaciones dependiendo de la persona, para mí la mejor sensación es la de ver como disfruta y valora otra persona tu esfuerzo.
cocina de producto, visual, divertida, atrevida, siempre intentando sorprender pero respetando la cocina de verdad, la del sabor, la que me enseño mi madre