Menú
En este menú, los tomates llevan un relleno de gazpacho helado, las chuletas van a la barbacoa, y el postre es templado
Hemos elegido hortalizas como entrante, como postre y como guarnición porque nos gustan, porque nos ofrecen sus vitaminas y minerales, y porque los tomates y las zanahorias aportan sus azúcares naturales
Ideas y Trucos: ver [1]
Primer plato: Tomates rellenos de granizado de gazpacho
Autor: Tatiana Suárez
Ésta es una alternativa al gazpacho y a los tomates rellenos, y la presentación resulta muy atractiva y refrescante.
La idea de este sorbete se me ocurrió al servirlo en cuencos de hielo y observar, a medida que lo tomaba, que escarchaba gracias al hielo de los cuencos y al movimiento de la cuchara
Ingredientes:
Tomates medianos del mismo tamaño
Para el vinagre de ciruelas rojas (opcional, si no se tiene, se obvia):
4 - 6 ciruelas rojas maduras y troceadas
Vinagre de vino blanco
Para el sorbete de gazpacho:
1 k de tomates de pera
1 diente de ajo pequeño
1 pimiento verde pequeño
Aceite de oliva y de girasol
Mezcla de 4 vinagres (de vino tinto, de ciruelas rojas, de frambuesa y balsámico) Si se desea, puede sustituirse la mezca de 4 vinagres por un único vinagre, el que más nos guste o tengamo a mano
Sal y pimienta negra recién molida
1) Para el vinagre de ciruelas (si no se desea hacer este vinagre, sustituirlo por cualquier vinagre que tengamos a mano)
Ponemos las ciruelas en un frasco de cristal de boca ancha con vinagre de vino blanco hasta cubrirlas. Tapar el frasco y dejar reposar varios días. Al cabo de este tiempo, el vinagre se habrá teñido de un bllo color rojo profundo y tendrá un delicioso aroma a ciruela, ideal para las vinagretas de verano. El vinagre conserva sus propiedades durante casi un año
2) Para hacer el sorbete de gazpacho
Trituramos en la batidora todos los ingredientes y vertemos la mezcla en la heladora si tenemos heladora, si no, lo volcamos en un recipiente y lo introducimos en el congelador, y batimos con un tenedor o un batidor de varillas cada 20 minutos. Conservar el sorbete en el congelador
3) Cortar la parte superior de los tomates y vaciarlos con una cucharilla. Espolvorearlos con sal y ponerlos boca abajo para que escurran.
4) Para servir, disponer los tomates en una bonita fuente y rellenarlos con una bola de sorbete. Cubrir con la parte superior que habremos reservado. Se puede decorar con una hojas de lechuga. Servir inmediatamente.
Segundo Plato: Chuletas de cerdo con espinacas y polenta
Autor: J Miguel Lobato
Ingredientes:
3 cucharaditas de aceite de oliva
100 g de mantequilla sin sal (o aceite de oliva)
150 g de avellanas picadas
2 dientes de ajo finamente troceados
2 manojos de espinacas, limpias
3 - 4 unidades de chuletas de cordero de Ávila por persona
250 g de polenta instantánea
1 l de caldo de pollo
Preparación:
Para las espinacas:
Ponemos un poco de aceite de oliva en una sartén donde saltearemos el ajo, las avellanas y las hojas de espinaca durante 2 – 3 minutos
Para la polenta:
Calentamos el caldo de pollo y, cuando esté hiriendo, agregamos la polenta, removiendo hasta que esté tierna. Agregamos la mantequilla (o el aceite), removemos y rectificamos el punto de sal. Reservamos en lugar templado
Para las chuletas
Extendemos el aceite de oliva sobre las chuletas y las marcamos en la barbacoa hasta el punto deseado
Para terminar:
En un plato, servimos la polenta en un extremo, las espinacas en el centro, y sobre ellas las chuletas. ¡Y ojo!, no tenemos que olvidarnos de sazonar las exquisitas chuletas de Ávila.
Postre: Buñuelos de zanahoria
Autor: Agustí Solá
Ingredientes:
600 gde zanahorias sin piel
6 dl. de leche
300 g de harina
2 cucharadas de aceite
2 huevos
Una pizca de sal
Aceite y mantequilla para freír
Una pizca de orégano
Azúcar blanquilla
Elaboración:
En un bol, mezclamos muy bien la harina con la leche, vigilando que no te queden grumos.
En un recipiente con poca agua, hervimos las zanahorias sin piel. No hace falta hervirlas mucho. Es mejor que queden al punto. Una vez hecho esto, las rallamos y las mezclamos con la masa de harina y leche.
A continuación, añadimos los otros ingredientes, los huevos, la sal, el aceite y el orégano.
Un vez bien mezclados, ponemos una sartén al fuego con aceite y un poco de mantequilla, cuando esté caliente, freímos pequeñas porciones de masa. Cuando estén doradas, las escurrimos en un colador, las espolvoreamos con azúcar blanquilla y las servimos
[1] Ideas y Trucos
#1
Para la guarnición: si no tenemos polenta a mano, prepararemos arroz que primero herviremos y, después, saltearemos en sartén con un poco de aceite. Retiramos del fuego, rectificamos de sal y espolvoreamos con salvia fresca
#2
Para los buñuelos: los buñuelos de zanahoria pueden ser postre como en este menú,, pero también pueden ser una buena guarnición o entrante si, en vez de espolvorearlos con azúcar, los espolvoreamos con sal Maldon
#3
Para los buñuelos: puedes acompañar los buñuelos con helado: a la zanahoria de va bien casi cualquier sabor, pero uno de nuestras combinaciones favoritas es el helado de canela
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![]() | Pedro Manuel Collado CruzLa cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente 1 receta publicada |