Me siento privilegiado al estar en esta zona y poder disfrutar de sus maravillosos productos tanto de mar como de tierra. Y ahora que es la temporada de su producto estrella como es el langostino de Vinarós, he aprovechado para ir en un barco de pesca de trasmallo y pasar una jornada de pesca en directo, para poder compartir esta experiencia. Y con quien mejor que con Mateo Fresquet, el maestro del langostino que lleva desde los 14 años en el mar, ya que le viene de generaciones anteriores, y su compañero Ramón que lleva desde los 13 años en el mar.
El día anterior habían Calado (calar es echar las redes al fondo del mar) las redes a pocos Kilómetros de la costa sobre las 20:00 de la noche, y a las 3:30 de la madrugada partimos del puerto de Vinarós con ellos a Chorrar las redes (Chorrar es recoger en términos marineros). Según se van recogiendo con los langostinos atrapados se les va poniendo hielo encima de las redes, una vez recogidas se cubren con tela húmeda, hasta llegar a puerto donde ya atracados se pondrán a desenredar los langostinos, que los van poniendo en agua de mar según los desenredan aun vivos la gran mayoría, para luego tirarlos según tamaño y calidad.
Estos auténticos lobos de mar conocen hasta el DNI del langostino, me contaban que su estacionalidad es de mayo a septiembre, estando en su mayor esplendor a partir de finales de junio, también dependiendo de la climatología. Lo pescan a una profundidad máxima de15 a 18 metros, y se encuentra a pocos kilómetros de nuestra costa en fondos de arena algo fangosos con flora y plancton que es su alimento.
El langostino es un crustáceo que según los biólogos tiene una vida corta de un año, aproximadamente de una temporada a otra. Es un crustáceo nadador que no suele encontrarse activo durante el día, es muy activo por las noches, y vive en todo tipo de mares y océanos, se adaptan a distintas situaciones y, según la especie de la que se trata se encontrará más en una zona o en otra. El langostino vive en zonas que no superan los 100 metros de profundidad, relativamente próximos a las costas. Suelen encontrarse en las zonas con arena, cerca de playas y también cerca de las desembocaduras de los ríos, donde las corrientes de agua cambian. Una de las zonas donde más langostinos pueden encontrarse es en las marismas y en los estuarios. Durante el día y cuando el sol hace acto de presencia, los langostinos están enterrados bajo la arena y, es por la noche cuando se preocupan por la alimentación y sale a alimentarse. Según la zona el langostino recibe un nombre u otro, en España algunas de las especies más famosas es el langostino de Vinaros. La carne del langostino tiene un sabor menos intenso que el de otros mariscos como la gamba o la quisquilla, pero su carne es mucho más suave, tanto de sabor como de color, ya que es prácticamente blanca con unos hilos rosas o rojos. El langostino de Vinarós no suele medir más de 15 centímetros y, su cuerpo es alargado y con la cabeza grande y los ojos sobresalidos, su abdomen no está abombado, sino que es aplanado.
La pesca de trasmallo es uno de los artes de pesca más bonitos, artesanos, y respetuosos con el mar y los fondos marinos que existen, ya que este arte de pesca consiste en arrojar al mar una línea de red de trasmallo al mar, que suelen ser desde 50 metros de largo hasta 2000 o 3000 metros de red, según tipo de presa y tonelaje del barco. Esta línea de red parte de una baliza o boya, que los marineros llaman gallo, que se arroja al mar y la red cae hasta el fondo, ya que lleva una línea de plomos, y a pocos metros de altura lleva otra línea con boyas de aire, que hace una pequeña pared de red en el fondo del mar, y esta red lleva dos redes trampa a los lados, de manera que el langostino quede atrapado. Al dejar caer la red en el fondo, y dejarla allí de la tarde a la madrugada a modo de trampa, y luego simplemente recogerla, hace que no arrastre y destruya los fondos marinos, y solo queden atrapadas piezas del tamaño que se busca según grosor de red, y pescar solo las variedades que se quieren.
Quiero dar las gracias a Mateo, y su compañero Ramón, auténticos lobos de mar por haber compartido conmigo un día de trabajo en el mar, que realizan a diario a bordo del Barco, uno de los barcos de pesca de trasmallo mas langostinero de todo el Mediterráneo, y haberme enseñado tantas cosas tanto de lo que nos ofrece el mar, como de sus recetas y sabores marineros.
Pedro Manuel Collado CruzLa cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente 1 receta publicada |