Cuando alguien o algo se pone ?DE MODA?, despierta casi de manera automática un interés importante en la sociedad en la cual vivimos. Este fenómeno se ha desencadenado también alrededor de la ?ALIMENTACIÓN SALUDABLE?.
El comer sano no debería ser una cuestión ?de modas? sino de salud, pero aun así, el creciente interés que ha despertado el tema también ha servido para que la sociedad actual se vaya interesando cada día más por comer de una manera más sana y equilibrada, sobre todo de manera constante, es decir, a lo largo de todo el año y no sólo en la pre-temporada primavera-verano.
De todas formas, para poder seguir los principios de la alimentación saludable, debemos adquirir una serie de principios básicos que nos permitan llevarla a cabo. Y es por ello que se hace necesario aclarar conceptos, muchas veces equivocados, y que circulan en determinados grupos de población especialmente sensibilizados con la salud, el bienestar y la pérdida de peso.
Estos conceptos erróneos acaban creando mitos y falsedades que, sin ningún tipo de base o fundamento, se divulgan de boca en boca entre la población y que no favorecen en absoluto la alimentación saludable sino más bien todo lo contrario. Entre todos estos mitos o errores que habitualmente circulan, intentaremos aclarar, al menos unos cuantos...
1) EL AGUA ENGORDA. Falso. El agua es el único alimento que no engorda porque no aporta calorías, ni antes, ni durante ni después de las comidas. Además, cuanta más agua contenga un alimento, menos energía o calorías nos aporta. Es por ello que el grupo de las frutas y verduras son de bajo valor calórico ya que casi el 95% de su composición es agua.
2) LA MARGARINA ENGORDA MENOS QUE LA MANTEQUILLA. Falso. Todas las grasas y aceites aportan las mismas calorías, o sea, todas engordan lo mismo. Lo que varía de una grasa a otra es su procedencia, es decir, de origen animal(saturada y no cardiosaludable) o vegetal (insaturada y cardiosaludable). Tanto la margarina como la mantequilla deben consumirse con mucha moderación, debido a la cantidad de grasa saturada presente en su composición. En el caso de la margarina, aunque su origen sea vegetal, en el proceso industrial de fabricación se generan grasas de tipo saturado, no cardiosaludables. La grasa de elección para aliñar y cocinar debe ser el aceite de oliva, de origen vegetal y cardiosaludable aunque con consumo igualmente moderado si existen problemas de sobrepeso.
3) LA LECHE DESNATADA NUTRE MENOS QUE LA ENTERA. Falso. La leche descremada contiene las mismas proteínas, calcio e hidratos de carbono que la entera. Lo único que varía es la cantidad de grasa y de vitaminas liposolubles contenidas en dicha grasa. Actualmente la industria se encarga de reponer en las leches desnatadas las vitaminas que se han perdido durante el proceso de descremado.
4) LAS PARTES BLANCAS DE LAS VERDURAS SON MEJORES QUE LAS OSCURAS. Falso. El color de una verdura depende de la cantidad y tipo de pigmentos que contiene, que son los responsables del color y no de la calidad nutricional.
5) LA SAL ENGORDA. Falso. La sal aumenta la retención de líquidos corporales y ello hace que pesemos más sobre la báscula, que no es lo mismo que haber engordado.
En la próxima edición seguiremos aclarando algunos más. Hasta el mes que viene.
Pedro Manuel Collado CruzLa cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente 1 receta publicada |