A Coruña es una ciudad
marinera de calles estrechas y galerías blancas abiertas a la luz del
Atlántico. También es una tierra de sabor y producto supremo que satisface los
paladares más exigentes de locales y visitantes.
La plaza de María Pita, en
el corazón de la ciudad, es un reflejo del equilibrio entre el pasado y el
futuro del carácter de una tierra que hace siglos se consideraba el fin del
mundo. Arallo Taberna, en el número 3 de esta histórica plaza, es el perfecto
ejemplo de armonía entre la esencia de la tradición gallega y la vanguardia actual. Un restaurante
de “cocina canalla” que recientemente ha abierto sus puertas en el madrileño
barrio de Chueca (calle de la Reina 31).
Arallo Taberna, que se
autodefine como “cocina contaminada”, no deja indiferente. Su carta repasa con
maestría los ingredientes tradicionales de la despensa gallega, pero lo hace
con un aire y una apariencia renovados y dispuestos a experimentar con los
límites del sabor. Una experiencia culinaria que combina el producto calidade con técnicas vanguardistas
aptas para todos los públicos.
No admite reservas ni ningún
tipo de remilgo. Una amplia barra con vistas a la cocina, para el deleite in
situ del tratamiento que los gallegos le dan al producto. La carta fusiona mar
y montaña, este y oeste, en platos sorprendentes y ambiciosos que cumplen
nuestras expectativas. La cerveza es Estrella Galicia, por supuesto, o en su
caso un buen vino de la tierra.
Arallo Taberna se descubre
como una de las grandes apuestas del panorama culinario madrileño para este
verano. Un local desenfadado con una calidad memorable a precios asequibles que
ha llegado para quedarse y del que ya hemos dado buena cuenta varios de los que
trabajamos en nuestra agencia de comunicación y marketing digital,
Gastronomicom.
![]() | Pedro Manuel Collado CruzLa cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente 1 receta publicada |