Una receta TodoPrimavera: calabacines de temporada, el aroma del azahar, los brotes de tomillo y el contraste de las aceitunas negras. Fácil, saludable, rápido, sin gluten, sin lácteos de origen animal ¡delicioso!
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Esta combinación de calabacines y azahar surgió, literalmente, de manera azaharosa: llegué a casa con los calabacines amarillos, y me parecieron tan elegantes que me vino a la mente el aroma que me había acompañado por la calle en esta primavera: el azahar. Hice una pequeña prueba previa y me sorprendió lo bien que se llevaban estos dos elegantes. Sólo les faltaba un contraste, mucho más terrestre y ligeramente astringente: la estupenda aceituna negra. Que, finalmente, se uniese el tomillo, fue casi obligado
calabacines
Podemos utilizar calabacines amarillos o verdes, los que tengáis a mano
El calabacín amarillo tiene un sabor más suave, pero el verde combina perfectamente bien para toda la receta
espirales
Si tenemos espiralizador, estupendo. Si no, podemos cortar el calabacín en juliana a lo largo (tiras finas), o bien, en los daditos de toda la vida, está igual de bueno
cocción
Las espirales se pueden hacer al vapor o salteadas
Si las hacemos al vapor, las coceremos unos 15-20 segundos para presrevar la textura
Esto lo tendremos especialmente en cuenta si son calabacines amarillos porque tardan menos en cocer; si son verdes, los dejaremos un poquito más: el mejor modo es, a los 15 segundos, probar una espiral. Si la encontramos a nuestro gusto, las retiraremos del fuego y dejaremos, sin tapar, que pierdan un poco de calor y escurran un poco el agua que saquen
Si las hacemos salteadas (a mí me han gustado más así), las saltearemos a fuego muy fuerte y durante unos segundos, lo justo para perder el tono crudo. Las sacaremos y dejaremos escurriendo un poco (el calabacín amarillo tiende a sacar un pcoo más de agua que el verde)
Si son dados de calabacín, no soltarán tanta agua, pero igualmente, la cocción o salteado debe ser breve
El plato podemos servirlo tamplado o frío, casi como ensalada
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1 calabacín amarillo
para la salsa de yogur y azahar
1 yogur vegetal escurrido en colador durante unas horas para que esté más espeso
Olivada negra ya preparada
Agua de azahar
Zumo de limón
Aceite de oliva
Sal
otros
brotes de tomillo fresco
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Limpiamos y espiralizamos los calabacines
O bien, los cortaremos, a lo largo, en tiras finas. O bien, los cortaremos en dados
para hacerlas al vapor
Colocamos el cestillo de vapor sobre una cazuela con agua a fuego suave
Rociamos las espirales de calabacín con un poco de zumo de limón y las ponemos en el cestillo de vapor. Tapamos y cocemos unos 15 segundos. Probamos una espiral y, si está a nuestro gusto, sacamos el cestillo y dejamos que las espirales enfríen y escurran el agua (destapadas). Reservamos
para hacerlas salteadas
En una sartén con un poco de aceite, salteamos a fuego muy fuerte las espirales de calabacín durante unos 5-10 segundos. Sacamos de la sartén y dejamos sobre una rejilla para que escurran el agua que suelten. Reservamos
para la salsa de yogur al azahar
Emulsionamos el yogur con un chorrito de zumo de limón, 2 cucharadas de aceite, 1 cucharadita (de las de café), d agua de azahar y una pizca de sal
para la olivada
Aparte, diluimos unas cucharadas de olivada con un poco de aceite de oliva virgen extra, lo justo para que la olivada esté un poco más fluida
para servir
Colocamos las espirales en plato
Sobre ellas, un hilo de yogur con azahar
Sobre el yogur, salpicamos cucharaditas de emulsión de olivada con aceite
Espolvoreamos por encima el tomillo fresco y servimos
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8 Palmito