Pollo en Olla Exprés con Salsa Romesco Ideal para el Verano

Voy a contaros un poco esta nueva historia El Diablito restaurante se instala en Stavanger, la cuarta ciudad mas importante  de Noruega, con más 150,000 habitantes. El restaurante está situado en un enclave privilegiado como es el puerto de Stavanger. Después de su aventura en Abu Dabi (UAE) nos atrevemos a ir a Noruega, país natal del dueño del restaurante, Heming Hollen.

Al frente de este nuevo proyecto, estoy yo de  Chef ejecutivo de la compañía, soy a demas ganador de diferentes concursos a nivel local y nacional, ex-vicepresidente de Ascaib, Eurotoques, jurado de ITQI, entre otros méritos.

Esta nueva propuesta es diferente a lo que el Diablito nos tiene acostumbrado, es un restaurante con una propuesta nueva, con un estilo de cocina completamente mediterránea, en la que quieren tener guiños a la cocina mallorquina y de un marcado acento español, en la que las tapas son protagonistas. Un concepto hecho para compartir, con platos pequeños, diferentes y con mucho sabor. La cocina está marcada por el producto y por su trato, aplicando técnica, brasa y más sorpresas que el  público noruego irá descubriendo poco a poco. 

 Esta  nueva aventura es  un reto para mi como Chef, en la que me encuentro muy cómodo con este estilo de cocina, descubriendo la calidad del producto noruego, tanto en los pescados como en su carne. 

El hecho de tener un cocinero español es muy valorado aquí, feliz de estar acompañado por dos cocineros españoles, de máxima confianza, con los que llevo años trabajando y que han apostado por mi en esta aventura. Mi objetivo es posicionar el restaurante entre los diez mejores de la ciudad, y continuar mejorando, día a día. Muy contentos por la acogida por parte del público y también por los medios gastronómicos de la ciudad, que en tan pocos días ya nos han posicionado entre los mejores restaurantes de la ciudad, situación que nos motiva aún más para seguir mejorando y subir nuestro nivel.

Otro aspecto a destacar es que es una cocina abierta en la que gente puede ver toda la cocina en directo y que que contamos con una barra donde también se puede comer. Hay una conexión entre la cocina y el cliente muy positiva y cercana, en la que podemos interactuar con ellos y hacerlos participes de esta experiencia.

Dentro de nuestra carta, destacan platos como el pulpo a la brasa, las carrilleras de cerdo con vino tinto, pollo con salsa romesco, el arroz negro de calamar, nuestras croquetas caseras  o un surtido de postres elaborados a diario, entre los que destacan la crema catalana, las peras al vino tinto o nuestra versión de arroz con leche. Queremos que nuestra carta sea un pequeño viaje por el mediterráneo, y en el que el cliente sea participe de ese viaje.