Los últimos años han sido una verdadera pesadilla para el vino, porque más allá de los problemas inherentes al sector
al sector, como la producción, comercialización y encaje normativo cada vez más estricto, han tenido que bregar con un súbito cambio de opinión, al dictado de la moda, de los opinacionistas nutricionales que como del rayo han pasado de aceptar los beneficios cardiovasculares y de otro salutífero tipo derivados del consumo moderado de vino (tradicionalmente defendidos por la ciencia, con especial obstinación de los de la Universidad de Harvard), a un negacionismo terraplanista que ha llegado a su culmen magufo en la afirmación realizada en el Telediario de las tres en TVE diciendo que el vino es: “… la droga legal más consumida en España”. Dejando atrás el desaire a la cerveza, si de bebidas fermentadas alcohólicas se tratase, tal afirmación demuestra una cada vez más generalizada agrafía de los que se ocupan de informar al público y consumidor, que lleva al despeñe cognitivo y al desconocimiento de la Ley plenamente vigente que declara al vino como un alimento.
A la postre, ladridos a los que cabalgan, porque la realidad del vino español es jubilosa en ámbitos cruciales. De tal dan fe las ponencias presentadas el 18 de noviembre en el VI Congreso Gastronomía y Salud, celebrado en Zaragoza bajo los auspicios de Heraldo de Aragón, en el que intervinieron cuatro brillantes científicos y gestores para hablar de nuevas cepas de levaduras que redondean sabores y aromas del vino, utilización de inteligencia artificial en la predicción y control de plagas, o el uso de macrodatos o big data en la toma de decisiones dentro del sector vitivinícola. De tal da fe que la biblia mundial del sector, Wine Spectator, haya subido a sus altares como mejor vino del mundo a Castillo Ygay Gran Reserva Especial 2010, de las bodegas logroñesas Marqués de Murrieta y mejor cava del mundo al Mascaró Brut Nature Pure, de Bodegas Mascaró en Villafranca del Penedés.
Cerrando, que bien pudiera ser abriendo, cada día se está mejorando la oferta de vinos respetuosos con el medio ambiente y el sufrido planeta y con la tradición no pocas veces ignorada o ninguneada. De ese futuro que ya es venturosa realidad son ejemplo señero dos jóvenes muy jóvenes, Alba y Sofía, que han diseñado un proyecto de grande aliento para la bodega Lacrima Terre, sita y plantada en Bellmunt del Priorat, de 82 hectáreas de las que 22 se dedican al cuidado y disfrute de viñedos de entre 20 y 85 años de edad y en las que maduran los jugosos varietales, garnacha y cariñena con los que desde ha poco producen sus dos primeros vino ecológicos,
Optare en versiones de blanco y tinto. Dicen las almas mater del proyecto que éste nace para: “… promover la conciencia de lo sostenible, el potencial de salirse de lo establecido, y la importancia de vivir en el presente a través del vino. Pensamos que el vino es el ejemplo perfecto de que nuestras acciones del día a día pueden tener un gran impacto. Son la intención y la atención a los detalles los que permiten convertir las vendimias más ordinarias en vinos extraordinarios”. Conciencia de la sostenible y respeto a la memoria que llueve sobre mojado porque desde 2013 la enóloga de la bodega, Judit Llop, trata los castigados suelos con vivificantes probióticos, de los que hasta entonces casi nadie había oido hablar, al tiempo que Alba y Sofía se han lanzado a un proceso productivo de microvinificaciones que combina la crianza en barricas de roble francés con el ánfora milenaria de barro sigilado.
En todo hay mucho, honrado y exquisito fundamento y así lo apuntan las jóvenes: “Queremos demostrar que es posible disfrutar de un vino excelente sin dañar el planeta; vinos con propósito y brindamos por el nuevo año, que con seguridad vendrá acompañado de esa conexión humana, cotidiana, relevante y atemporal que se genera al compartir y disfrutar de una copa de vino”.
Así sea.
Pedro Manuel Collado CruzLa cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente 1 receta publicada |