Floren Bueyes Sánchez El vino provoca : pasión , placer y buenos sentimientos cuando la persona que lo bebe tiene buen Corazón |
MARMITA, ARROZ Y RABAS
Quienes creemos en
lo que hacemos, quienes creemos en la gastronomía, quienes día a día
reafirmamos que la cocina cántabra es lo que parece, no dejamos de aprovechar
la más mínima ocasión para promocionar nuestros productos y por extensión
nuestros platos, en esta ocasión, algunos de lo más clásico de nuestra cocina.
Eso sí, para ello
nos nutrimos con los ingredientes de casa, en la medida necesaria y como nos
marca la cocina contemporánea echamos mano del producto foráneo que
necesitamos, faltaría más.
Con esta premisa y
con un proyecto en la mano, me llama Carmen Ruíz concejala de dinamización
social del ayuntamiento de Santander y me propone dar a conocer durante el test
de Vela, que se celebró la semana pasada para preparar el 2014, tres platos de
nuestra cocina: arroz con almejas (amayuelas), marmita de bonito y rabas. ¿Por
qué eligió estos platos? no lo sé, seguro que ha sido por sus gustos o los de
la corporación. Pero me da igual el
criterio, personalmente me gustó la idea y como presidente de Cocineros de
Cantabria, me puse en marcha, lo comenté con mis colaboradores habituales y les
pasó como a mí, todo lo que sea sacar y promocionar nuestra cocina, está bien,
queremos salir con la cocina a la calle y dar a conocer nuestro trabajo más
allá de nuestras paredes cotidianas, estamos dispuestos a enseñar lo que
sabemos y no fallar en el intento.
El martes día 10, era
la primera prueba, teníamos que preparar un arroz con almejas, o con amayuelas
como le llaman en Santander, un arroz al estilo de paella, ni risotto ni nada
parecido, queríamos un clásico arroz con almejas, pero debido al mal tiempo
decidimos aplazarlo para el miércoles, acertamos con el cambio.
Una vez preparada
la “Mise en place”, léase preparado de ingredientes necesarios para cocinar el
citado arroz, el fumet lo haríamos in situ, para lo que ya estábamos
preparados, la cantidad de raciones a preparar unas 300, que sacaríamos unas
600 degustaciones; el miércoles teníamos la preparación y la hora de reparto
habíamos quedado sería las 20:00, minuto arriba minuto abajo.
El lugar de la
elaboración eran los jardines de la escuela de Náutica, frente a CAR de vela,
el corazón del los actos a celebrar durante toda la semana, aquí cocinábamos y
repartíamos las degustaciones.
Pero volviendo al
principio, ¿Cómo íbamos a preparar esto para las raciones comentadas? ¿En qué
recipientes? ¿Cómo lo íbamos a ubicar en pleno jardín?
Me puse en contacto
con Ángel, de las Hijas de Ángel de Torrelavega, es especialista en grandes
paellas y así nos trajo a Santander 2 paellas para elaborar el arroz, teníamos
los utensilios necesarios. Cada recipiente hace unas 150 raciones, con lo que
era perfecto para nuestra necesidad. Así que cité a los cocineros a partir de
las 18:00 horas, con puntualidad exquisita, fueron llegando los profesionales,
hasta un total de 12, todos ellos jefes, ayudantes, pinches, veníamos
dispuestos a hacer lo que fuese, es decir, a arrimar el hombro, todos
involucrados, maravillas de la profesión de cocinero.
Instalados los
quemadores, colocadas encima las paellas, comenzó el ritual, aceite, verduras
cortadas en brunoise (cuadraditos), marcamos el arroz 30 kilos y así a las 19:15 lo mojamos, ya
que el arroz en tales recipientes tarda más que lo que estamos acostumbrados en
nuestra cocina.
Ya casi al final,
cuando faltaban 10 o 15 minutos, agregamos las almejas, unos 30 kilos y seguido
el perejil fresco picado, no entiendo los cocineros que todavía usan esa hierba
seca que se permiten llamar perejil, queríamos hacer un arroz como en nuestra
cocina y creo que lo conseguimos, según la opinión de los comensales.
Sin darnos cuenta,
la fila o cola, se fue estirando desde las vallas cercanas, hasta casi el
palacio de festivales, así que a la hora prevista comenzamos la degustación, la
fila parecía rellenarse por momentos, no se acortaba y al cabo de una hora y
pico, terminamos y nos felicitamos por la opinión unánime después de la
degustación, estaba delicioso y al final nos quedamos mirando las paellas en
las que, ni rebañando quedó un grano para que nosotros lo pudiésemos degustar.
Pero fue fantástico, se terminó el arroz a la vez que la fila. Esa era nuestra
idea, que llegase para todo el mundo y no quedase nada en los recipientes,
algunos de los cocineros gritaban ¡¡ Prueba conseguida!! Como si del programa
que apostamos se tratara.
Me gustaría
transmitir la vivencia de cocineros que no se conocían (esto es difícil, así
que os invito a asistir al siguiente evento y lo vivís en vuestras carnes),
como elaboramos la receta de arroz, receta clásica donde la haya, cada uno con
una tarea durante la elaboración y otra durante la degustación, apoyados en
todo momento por Carmen Ruíz, en las tareas de reparto.
Quedamos quienes no
teníamos obligaciones profesionales, recogimos los bártulos y dejamos las
paellas impolutas para al día siguiente elaborar en ellas la marmita, pero esto
es el segundo acto.
Floren Bueyes
Pedro Manuel Collado CruzLa cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente 1 receta publicada |