6975 recetas de cocina   |   17508 noticias de gastronomia   |   580 autores   |   21 empresas



¿Qué Alimentos Comer O Evitar Durante la Lactancia?


share by WhatsApp

La lactancia es una importante época de las mamás, y más aún para los bebés criados de forma tan natural o como antaño, o sea a través del "nodrizaje", aunque la lactancia se está debilitando o perdiendo esta excelente costumbre mundial, ya sea por comodidad, falta de tiempo, silueta o cualquier otro inconveniente, o excusa? Y lo que nos están "vendiendo" en el mundo occidental son imágenes tercermundistas en las que vemos cómo escuálidos bebés intentan sorber de su natural fuente de alimentación de una más escuálida mamá,? y a ser posible con un millar de moscas uniéndose al "banquete", para vergüenza del "primer mundo" y enorme falta de humanidad y gran corrupción de sus propios gobernantes.

Es importante saber que la nutrición de la madre es vital para la correcta composición, sabor y textura de su leche, y vital para el correcto desarrollo tanto físico como afectivo del bebé.

Un estudio de la Asociación de Dietistas Americanos afirma que durante el embarazo, desde el primer momento y hasta que termina la lactancia natural, la ingesta de colina, o vitamina B7, es fundamental para el desarrollo neuronal que potencie la memoria del futuro ser, ya que una vez nacidos, ya no surte el mismo efecto.

Alimentos ricos en vitamina B7 o colina son: Cacahuetes, Yema de huevo, Leche entera, Higadillos, Sesos, Soja y Derivados, Levadura de cerveza, Germen de cereales, Hígado de ternera

También es vital para el correcto desarrollo del feto la ingesta de vitamina B9, o ácido fólico. La cantidad mínima diaria de ácido fólico, debería estar sobre los 300-400 mg. al día, en época normal y algo más elevada durante el embarazo, y la lactancia. (Consultar al ginecólogo o pediatra). Alimentos ricos en vitamina B9 o ácido fólico: Acelgas, Cilantro, Grosellas, Ostras, Aguaturmas, Ciruelas, Hígado de ternera, Quesos azules, Ajonjolí, Coles de Bruselas, Hinojo, Remolacha, Berros, Enebro, Judías verdes, Salvia, Calabaza, Espárragos, Lácteos enteros, Sésamo, Cardos, Espinacas, Lentejas, Yema de huevo, Cereales integrales, Frambuesas, Melón, Zanahorias, Cerveza "Sin", Frutos secos, Nabos, Champiñones, Garbanzos, Naranjas, Chufas, Germen de alfalfa, Ortigas

Buenas son también unas tisanas de semilla de anís estrellado, cilantro o de sésamo, pues además de incrementar la producción de leche, sus aceites esenciales pasan al bebé a través de la leche, evitándole cólicos por gases, relajándole y ayudándole a dormir. Es importante recalcar que alguna de esas infusiones en exceso pueden ser tóxicas, por ejemplo, el anís estrellado, o badiana, fue retirado de la venta en el año 2001, debido a su reiterado mal uso en Holanda, y para evitar posibles efectos perniciosos para la salud de nuestro bebé. En caso de duda, consultar siempre al pediatra.

Antiguamente se usaban cataplasmas con hojas de menta sobre los pechos de las lactantes para incrementar su producción,... Eso era antes de la Revolución Industrial, o sea que nada tiene que ver con el neoliberalismo, o con la globalización.

Alimentos que se deberían evitar o limitar durante la lactancia: Ajo, Bebidas isotónicas, Espárragos, Guayabas, Menta, Alcachofas, Berros, Higos o brevas, Perifollo, Artemisa, Cacahuetes, Lentejas, Ruibarbo, Azafrán, Chocolate, Marisco, Soja.

Por ejemplo, no deben comer espárragos o ajos, pues su sabor puede pasarse a la leche y los bebés rechazarla sin que sepamos el motivo, aunque sí deben comer "un poco de mucho y no un mucho de poco" como explicábamos con la Dieta Equilibrada. Además el azafrán, y su color amarillento, a través de la leche podría pasar a la piel del bebé; tampoco se debe abusar del ajo, cuyo sabor también podría pasar a la leche y ser rechazada por el bebé; y el ruibarbo que disminuye la producción láctea.

El marisco, cacahuetes, cacao, chocolate o derivados están en la lista de prevención por el riesgo de alergia, aunque evidentemente si la mamá sabe que es alérgica a otros productos, éstos ni olerlos.

Tampoco hay que dejar en segundo lugar la gran importancia de que los anticuerpos generados por las mamás a lo largo de su vida, de forma natural o a través de diversas vacunas, pasan a formar parte del desarrollo del sistema inmunitario del bebé, gracias a la leche materna.

Los alimentos ricos en magnesio son vitales durante la lactancia. La cantidad diaria recomendada alcanza los 350 mg. en el hombre y los 300 mg. para la mujer, mientras que los niños demandan 150 mg. al día. El embarazo y la lactancia elevan este nivel hasta los 400 mg. Son ricos en magnesio, los siguientes alimentos: Germen de maíz, Harina de pescado, Almendras, Chocolate negro, Pan integral, Judías blancas, Lentejas, Alcachofas, Garbanzos, Coles de Bruselas, Cereales integrales, Queso, Frutos secos, Marisco, Acelgas, Soja, Gérmenes de legumbres, Verduras de hoja verde, Cacao y sus derivados, Pipas de girasol, Dátiles, Arroz, Pescado, Leche en polvo, Pescado, Avellanas, Higos secos, Plátanos, ... y algunas Aguas Minerales ricas en este oligoelemento (ver etiquetas).

Como se puede ver, hay alimentos que están en los alimentos a tomar, al mismo tiempo que los mismos están en los que hay que evitar. Las listas expuestas son una relación de alimentos con cierta riqueza de alguna vitamina u oligoelemento que en principio es beneficioso, o pernicioso, con lo que volvemos a la famosa frase de que "hay que comer poco de todo y no mucho de poco".

Se sabe que en los primeros 12-18 meses de la vida del niño/a, se crean las células adiposas, esas con la especial capacidad de retener la grasa, por lo que es muy recomendable, que durante esos primeros meses de la vida de nuestro bebé, evitemos darle grasas añadidas, por muy bueno que sepamos que es el aceite de oliva, cuando le hagamos sus primeras papillas naturales habrá que evitarlo, así como cualquier otro tipo de grasa añadida. Darle pescado blanco, en lugar de azul; pechuga de pollo sin piel, carne de conejo o ternera magra en lugar de cerdo; leer las etiquetas sobre los contenidos en grasa de galletas, helados, natillas, huevos, etc. Conviene consultar este principio de alimentación infantil con tu pediatra de siempre, ya que pueden afectar su futuro aspecto físico o de salud, mediante problemas de obesidad.

Está constatado que la lactancia puede evitar o frenar la aparición del cáncer de mama. La industria alimenticia está investigando una encima que hace que la leche materna elimine cualquier rastro de sabor amargo, hecho que podría ayudar a eliminar algunos sabores indeseados en algunos alimentos y medicamentos.


  0 COMENTARIOS




SÍGUENOS
          
SUBSCRÍBETE





AFUEGOLENTO EMPLEO

AUTOR DESTACADO

   

Pedro Manuel Collado Cruz

La cocina para mi es producto bien tratado sin enmascarar sus sabores, cocina de verdad de antaño con un toque diferente

2 recetas publicadas

Ver blog del autor














Desde 1996, el magazine gastronómico en internet.


© 1996 - 2024. 29 años. Todos los derechos reservados.
SUBSCRÍBETE

Recibe las novedades de A Fuego Lento


SÍGUENOS