A comienzos de mayo ya empiezan a revolotear las dos palabras que todas las mujeres odian, “operación bikini”. Comienzan las dietas milagros llenas de recetas poco saludables y nada apetitosas. Pero la clave de perder esos kilos de más de una forma saludable, además de ir al gimnasio, es comer de todo, en las cantidades adecuadas y en las horas correctas.
Una de las recetas que más popularidad está teniendo este año con vísperas al verano es el batido de kiwi, manzana y plátano. El uso del kiwi en esta receta tiene una gran importancia. Esta fruta, que proviene del árbol Kiwi, tiene unas propiedades muy saludables para todas las personas que están pensando en perder un par de kilos para estar saludables este verano.
El kiwi, además de contener vitaminas C y E, tienen incluso más vitamina C que las naranjas o los limones, hacen que las células estén sanas y se rejuvenezcan. Es una fruta que contiene tan solo 54 calorías por 100 gramos, se trata de una fruta poco calórica, esto significa que estará siempre pendiente en todas las recetas que estén dentro de dietas de adelgazamiento.
Además de ser una fruta poco calórica, tiene un gran contenido de agua y muchas cantidades de potasio, por tanto hace que se eliminen líquidos con rapidez. Otra de las propiedades que ofrece esta fruta es la regulación y mejora del tránsito intestinal; el kiwi actúa como contraataque al abuso extremo de plátanos, fruta propensa a provocar estreñimiento.
El batido de kiwi, manzana y plátano es receta fácil de hacer y muy recomendable para empezar el día con el desayuno, un postre para los días calurosos de verano o una merienda muy sana. La combinación entre estas tres frutas hace que esta receta no tenga un sabor muy ácido ni muy dulce o empalagoso. Es importante que el kiwi no esté verde, es la mejor forma de evitar el toque ácido, y el plátano dará ese equilibro de sabor sin rozar con el sabor empalagoso que tango cansa.
Esta receta tan veraniega necesita 4 kiwis de tamaño medio, una manzana golden, uno o dos, al gusto, plátanos de Canarias, medio litro de agua y sésamo negro, como decoración, si no se es muy fan no es necesario para la receta.
El primer paso para realizar esta receta es simple:
Se pela el kiwi y se trocea bien. Se puede dejar una rodaja de esta fruta para crear una presentación algo más elaborada colocándola en la copa y recrear esa decoración tan tropical. Una vez que se tiene la gruta troceada, se limpia la manzana y también se trocea, y al igual que se hizo con el kiwi, también se puede dejar otra rodaja para usarla como decoración. Es una receta de cocina muy simple, por eso es la misma preparación con la fruta restante, el plátano. Se pela el plátano y se trocea.
Una vez que tenemos las tres frutas troceadas es momento de poner en práctica la batidora. Se introduce el kiwi, el plátano y la manzana en la batidora e introducimos e medio litro de agua. El objetivo del agua en esta receta es ayudar a que los ingredientes se trituren bien, evitar los grumos y poder tener una textura cremosa y suave.
No hay tiempo fijo establecido en la batidora, hay que revisar el líquido hasta que no haya rastro de alguno de grumos.
Una vez que solo se vea un líquido cremoso es hora de servirlo. Aquí entra en juego la creatividad de cada persona, como consejo, es bueno servirlo en un vaso o copa y utilizar las rodajas que en el comienzo de la receta se dejaron apartadas. Para rematar se puede añadir sésamo negro por encima. Esto creará una bebida digna de un resort turístico en Cancún.