El colectivo de empresarios de Food trucks se han movilizado para reivindicar que se regularice su situación tras el parón forzoso al que se han visto obligados debido a la crisis sanitaria del covid-19. La irrupción de la pandemia en nuestro país hizo que se cancelasen todos los eventos programados y desde el pasado mes de marzo, las food trucks permanecen aparcadas sin ningún tipo de actividad.
Más de un centenar de empresarios de este colectivo del street food han decido impulsar una plataforma que bajo el
lema “SALVEMOS a los FOOD TRUCKS” quieren concienciar a la administración para que regularice su situación, enmarcándoles y dotándoles de los mismos derechos que tienen los puestos estacionales como helados o castañas o los puestos fijos como churrerías o kioskos de parques, entre otros.
El colectivo de food trucks solicita que se les permita instalarse de forma permanente en determinados lugares de ciudades y pueblos, ubicaciones consensuadas con los ayuntamientos, para poder realizar su actividad: la alimentación, considerada como un servicio esencial. “Queremos abrir un diálogo con las administraciones que faciliten nuestra actividad mediante tasas de ocupación de la vía pública”, solicitan sus portavoces.
Sector pionero del take away, consideran que el street foodes seguro ya que los vehículos se sitúan en la calle y al aire libre, además pueden complementarse con el servicio hostelero desplazándose y ubicándose en zonas donde éstos últimos no lleguen, dando así un servicio a clientes de complejos de oficinas o que no tengan posibilidad de cocinar.
Para concienciar tanto a las administraciones como a la ciudadanía, el pasado fin de semana el colectivo de foodtrucks puso en marcha una campaña en redes sociales con los siguientes hashtag:
#SalvemosALosFoodtrucks