“Los expertos consideran que los ciclos económicos y sociales del turismo suelen durar unos cuarenta años”, afirmó Butler. “Transcurrida esa etapa, hay que replantearse varios factores. Estamos ante uno de estos fines de ciclo. Entre los grandes conceptos a tener en cuenta está el fomento de la salud preventiva a partir de la gastronomía y la difusión de nuestra información, ofertas y promociones a través de los medios de comunicación. En este sentido, se constata una crisis en los medios convencionales y una apuesta cada vez más decidida, por el uso de las Redes Sociales y las ventajas que nos ofrece internet.”
El objetivo principal de la reunión es potenciar la Marca España para que siga siendo uno de los destinos turísticos más importantes del planeta, y el sector de la Hostelería, así como el de Ocio, será sumamente importante en la recepción de turistas en el país. Entre las diferentes propuestas destacan el recién elaborado plan de marketing, potenciar el uso de tarjetas de fidelización y modernizar e invertir en los destinos más maduros del territorio español, con una nueva línea de Créditos ICO de 266 millones de euros. Otra propuesta importante fue la realización de un estudio de 16 mercados emisores con un seguimiento mensual de su evolución. La gastronomía española será la principal clave de estos proyectos, ya que se trata de una de las motivaciones más importantes en la elección de España como país a visitar por los turistas. Y la estrella por excelencia es la Tapa, como marca y producto de nuestra gastronomía a nivel internacional. De ese modo, seguiremos vinculando nuestra gastronomía a la idea de felicidad. Una tarea importante en este intento de crecimiento de la Marca España es trabajar con las comunidades autónomas y los municipios. Los responsables de Turespaña se encargarán de visitar las diecisiete Comunidades Autónomas para concretar y promover una serie de proyectos como “Saborea España”, “La capital española de la gastronomía” y el “Día mundial de la tapa”. Por otro lado, los miembros del comité ejecutivo del FEHR trataron con Butler la fragmentación y descoordinación entre las distintas administraciones autonómicas en el plano legislativo, que no se aplican de forma homogénea en todas las ciudades y disminuyen la competitividad y efectividad del sector en temas como la ley de ruidos, el horario de apertura o las condiciones para adquirir una licencia.