En mi casa siempre tenemos postres que son: dulces, salados, amargos y dulces e incluso frio y calientes. Según en la temporada del año. Este es el caso de un postre así, divertido y diferente para una noche de otoño. Siempre trato de usar poca azúcar y que hable por si solo el producto. En el paso a paso explicare más...
- COMENSALES 4
- SE PREPARA EN 60 minutos
- DIFICULTAD Fácil
- PRECIO Bajo
Calabaza, de las que son bien naranjas y pequeñas...
Vainilla en vaina.
Almendra salada tostada.
Remolachas rojas y azúcar
Helado de yogurt de cabra.
Cocinar la calabaza entera en el horno a 200 grados, entera. Una vez tostada la piel y cocida por dentro retirar del horno y eliminar las semillas con mucho cuidado, los cabellos que envuelven la semilla son de lo más dulce, tratar de reservarlos. Triturar con la piel tostada y vainilla al gusto en la Thermomix. Si es necesario agregar un poco de miel, para endulzar un poco más. (esta es la parte dulce)
Con la almendra la picamos rústicamente con un cuchillo y reservamos. (parte salada del postre)
Las remolachas las cocinamos también enteras en el horno, una vez cocidas cortar en pequeños cubitos y caramelizar con el azúcar tostado, casi quemado el azúcar, tener cuidado. (esto nos aporta tierra, dulzor y amargor).
Para el helado de yogurt de cabra, primero que todo conseguir una buena leche de cabra y luego buscar la mejor receta para que el helado no tenga mucho porcentaje de azúcar y nos quede bien acido, lo más acido posible. También podemos pedir a nuestro amigo heladero que se encargue de ello. (esto nos aporta la acidez)
En un plato poner una cucharada de pure de calabaza y con la ayuda de una cuchara hacer un círculo, agregar un 5 cubito de remolacha caramelizada por encima del pure, una quenelle del helado de yogurt de oveja y en polvorear con las almendras.