El mayor club de aficionados al vino de Jerez del mundo, el Club Lustau Almacenista, acaba de cumplir su décimo aniversario.
Diez años después de su fundación, el Club tiene en la actualidad nada menos que 8.000 socios de treinta países de todo el mundo: desde Estados Unidos hasta Nueva Zelanda, desde Argentina hasta Japón, pasando por toda Europa, y lugares tan dispares como Turquía, Israel o Hong Kong, los vinos de Lustau atraen a miles de aficionados al Sherry que se han unido en uno de los clubes de vinos más fieles y cohesionados de los que existen.
La bodega Emilio Lustau fue pionera en 1997 al crear este Club como una novedosa herramienta de promoción directa hacia el consumidor, transmitiendo de primera mano la riqueza de la Cultura de los Vinos de Jerez, sus posibilidades de maridaje con la gastronomía, y el entorno ?en vivo? de la Denominación de Origen.
Coincidiendo con este décimo aniversario, un grupo de treinta socios del Club visitaron recientemente la ciudad. Esta visita anual es uno de los actos más importantes de todos los que realiza el Club a lo largo del año, y quizá el más destacado, porque permite a los socios entrar en contacto directo con la bodega, sus viñedos, y su entorno.
La bodega ha preparado un intenso programa de actividades que incluye visitas a las ciudades de Jerez, El Puerto de Santa María y Sanlúcar de Barrameda; seminarios y talleres de trabajo sobre el Fino, la Manzanilla, el Amontillado y el Oloroso; almuerzos de maridaje en los que los socios podrán comprobar nuevamente las enormes posibilidades de nuestros vinos en combinación con las más variadas propuestas gastronómicas; la visita a las propias bodegas de Lustau en Jerez y el Castillo de San Marcos, y excursiones a los viñedos, en plenas faenas de vendimia.
Con un ritmo de crecimiento de cerca de un millar de nuevos socios al año y un alto grado de fidelización, el Club Lustau Almacenista se ha consolidado como una ?gran familia? de amantes de los Vinos de Jerez de alta gama que ofrece esta bodega.
La diversidad de países de procedencia de los socios está en clara consonancia con la vocación exportadora de la casa Lustau, que mantiene una fuerte presencia comercial en medio centenar de países de todo el mundo, y dedica a la exportación un 90% de sus ventas anuales.
Con motivo de su décimo aniversario, el Club afronta una nueva etapa marcada por una decidida vocación de expansión. La bodega ha trasladado desde Londres a Jerez el centro de gestión del Club y apuesta por extender sus socios por todos los continentes, reforzando una tendencia que se ha venido registrando en los últimos años: si en los inicios se trataba de un club eminentemente británico, cada vez es mayor el número de asociados de las más diversas partes del globo.
Para ello, Emilio Lustau ha realizado una decidida apuesta por las nuevas tecnologías, modernizando sus canales de comunicación directa con los miembros del Club e incorporando herramientas digitales y electrónicas que permitirán abrir el Club a mayor número de integrantes, con independencia de su ubicación.