Llega el verano y Bodegas Binifadet presenta una de sus mejores creaciones: Merluzo, el vino más marinero de Menorca. Estas bodegas de Menorca llevan diez años entregando lo mejor de la tierra y del campo menorquín en forma de chardonnay, merlot, syrah
pero hace tres años entendieron que no podían obviar uno de los principales atractivos de la isla: el mar. Y así nació Merluzo.
Merluzo es un vino joven y alegre que refleja a la perfección el estilo de vida menorquín. Un personaje sin complejos, que valora las cosas sencillas de la vida, amante del mar, muy mediterráneo y muy disfrutón. Merluzo es inquieto, por eso cada año cambia su etiqueta.
Como hay dos Menorcas, la de la Costa Norte y la de la Costa Sur, hay dos Merluzos: tinto y blanco, uno para cada momento. Ambos son vinos frescos, ligeros y mediterráneos, vinos para el verano, para compartir y para disfrutar. Pero sobretodo, vinos pensados para que te apetezca la segunda copa.
Merluzo Blanco 2014:
Es un vino ligero y fresco, con una graduación de 12 grados. Se elabora en un 60% con merlot vinificado como vino blanco, complementado con chardonnay, muscat y malvasía. Tras una fermentación a 17 grados centígrados en depósitos de inox, se estabiliza a -3 grados. No realiza maloláctica ni tiene paso por barrica. Visualmente presenta un color amarillo pálido. Olfativamente, desprende aromas primarios de la variedad Merlot muy suaves, como frutas del bosque y cerezas, acompañados de toques de confitura y florales típicos del Moscatel y la Malvasía, como el pétalo de rosa o lichy. En boca, es amplio, fresco, con un juego suave entre los gustos redondos y sedosos propios de la uva Merlot y toques de frutas de árbol maduras, como melocotón y albaricoque. Marida a la perfección con pescados, aperitivos y arroces. Se recomienda servir a una temperatura de 8 grados.
Merluzo Tinto 2014:
Es un vino ligero, mediterráneo y con aromas de chocolate y tiene una graduación de 12,5 grados. Se elabora en un 70% con Merlot y en un 30% con Syrah. Tras una fermentación a 23 grados centrígrados en depósitos de inox, se realiza una fermentación maloláctica. No tiene crianza ni barrica. Presenta un color rojo suave y desprende aromas de yogur de frutos rojos. En boca, es ligero, suave y afrutado. Marida muy bien con todo tipo de comidas y se recomienda servir a 12 grados.