Pendientes de hoja de vid, anillos, pulseras y colgantes
todos estos accesorios tienen en común el mundo del vino. El Grupo El Lagar de Isilla da un paso más en su carrera y emprende otro nuevo proyecto, el lanzamiento de su primera colección de joyas. Su original y exclusivo estilo y prototipo, el molde es la hoja original que recogen de la planta de la viña, da lugar a una línea de complementos que aúna elegancia y feminidad pensando siempre en el cliente que busca novedosas y singulares experiencias.
Dicen de una joya que lleva implícita el glamour y la sofisticación. Su diseño es una práctica milenaria que llega hasta nuestros días, en constante evolución e innovación. Desde El Lagar de Isilla hacen su particular apuesta por el negocio de la artesanía y la bisutería.
La idea surge de Jose Andrés Zapatero, su propietario, hace tan sólo unos meses. `Decidimos abrir una nueva unidad de trabajo y nos embarcamos en el proyecto del diseño. Queríamos obtener una piezas únicas y exclusivas en las que prevaleciesen la sencillez y la simplicidad pues representa la esencia de lo que somos y a lo que nos dedicamos, al vino´.
Grupo El Lagar de Isilla da un paso más en su carrera y se embarca en este nuevo proyecto: el diseño de su primera colección de joyas en el que su original estilo da lugar a una línea de complementos que aúnan elegancia y feminidad. El resultado es una línea de complementos, de joyas delicadas, en tonos cobrizos y plateados, con detalles que enamoran, de alhajas que se convierten en las perfectas compañeras de cualquier look pudiendo ser usadas tanto de día como de noche por un cliente que busca siempre un valor añadido en el servicio, en este caso novedoso y singular.
El proceso de fabricación es simple. La elaboración de estos accesorios, hechos a mano, arranca literalmente de la propia hoja de la viña solo pudiéndose elaborar desde abril hasta octubre ya que es cuando el equipo de trabajo selecciona las primeras hojas de las viñas que se extienden frente al hotel. Éstas se recogen, con sumo cuidado, y se trasladan a un centro especializado en el que el joyero y el diseñador, a través de la técnica de bañado en plata o cobre, componen y combinan los elementos para dar como resultado unas originales y llamativas piezas.
Es un accesorio que siempre llevará un prototipo original por lo que el proceso de fabricación es reducido y exclusivo. Se trata de un obsequio único, original y novedoso para regalar a la pareja, familiar o amigo y cuyo punto de venta se encuentra en el complejo hotelero que tienen en La Vid. Lo mejor, su precio: estas piezas se pueden adquirir desde 22 euros.