¿A quién no le gustaría probar una cerveza de 1840? Científicos finlandeses plantean recrear una receta de este año a partir de cinco botellas halladas en un naufragio en 2010.
Este barco, que naufragó hace ya 170 años, no dejó en su interior cofres llenos de oro ni riquezas, sino una herencia muy curiosa: varias botellas de champán y cinco botellas de cerveza. El champán, conservado en perfectas condiciones, fue subastado ya en Finlandia, país donde se encontró el naufragio en la Isla de Aland.
Los 50 metros de profundidad, las bajas temperaturas y la oscuridad del fondo marino han contribuido a conservar también las botellas de cerveza que, aunque no son consumibles, sí mantienen intactas sus propiedades. Por ello, el Gobierno de las Islas Aland y la fábrica cervecera Stallhagen han llegado a un acuerdo para analizar la composición de esta cerveza centenaria e intentar reproducir la receta original, para poder así iniciar su elaboración y comercialización.
Según los científicos encargados de su análisis, la cerveza ha mantenido su color dorado pálido, y en su receta original contenía toques de rosa, almendra y clavos de olor. "En base a los análisis químicos que hemos hecho de la cerveza y con la ayuda de un maestro cervecero sería posible tratar de hacer esta bebida lo más parecida posible al original", explicó a Reuters Annika Wilhemson, del centro de investigación técnica VTT en Finlandia.
La empresa cervecera cree que será un producto de gran interés para los amantes de la cerveza en todo el mundo, por lo que planea una inversión elevada en una campaña de marketing para darla a conocer alrededor del planeta. Por su parte, el gobierno de las Islas pretende dar a esta iniciativa un carácter benéfico, ya que parte del dinero obtenido de su venta se planea destinar a labores de obra social.