Parece que el gin-tonic, más allá de una moda que tantas cartas de cócteles con ingredientes imposibles llenó, vino para quedarse. Y la marca Gin Mare, ginebra de esencia mediterránea con toques de oliva arbequina, albahaca, romero y tomillo, acaba de presentar cuatro nuevos cócteles diseñados para cuatro momentos específicos, pero todos ellos con el Mare Nostrum como punto común. Cuatro ejemplos de que la ginebra no sólo marida con tónica pero refresca siempre.
Brisa griega (Inspiración ‘Escape’)
Esta receta, nacida en Grecia, fue la ganadora de la última edición del concurso ‘Inspiración Mediterránea’. Su toque clave es la lavanda y se sirve en una copa de champán fría, decorado con esta flor.
Ingredientes:
Hixter G&T (Inspiración ‘Gastronomía’)
Tras investigar químicamente cómo debería ser el perfecto gin-tonic del siglo XXI -ni idea de en qué se basaban para decidir cuál debe ser la composición actual de la mezcla-, el mixólogo Stuart Bale y el chef Mark Hix decidieron que tenían la respuesta. Es exótica y se sirve en copa de balón con mucho hielo.
Ingredientes:
Med & Turf (Inspiración ‘Life Style’)
Un cóctel granizado para conseguir la versión más refrescante de la bebida. Licuar todos los ingredientes, añadir hielo y servir en una jarra helada decorado con una hoja de albahaca.
Ingredientes:
Última parola (Inspiración ‘Clima’)
Revisión del tradicional cóctel ‘Last word’ en la que se apuesta por una mayor carga de aromas y un toque ahumado gracias al mezcal. Agitar todos los ingredientes en la coctelera, incluyendo el romero, colar y servir en una copa tipo martini fría.
Ingredientes: