Un ternero con 1.800 filetes
En el caserío Zaldu-Zar de Zizurkil, en Guipúzcoa, se ha criado un ternero que dobla las dimensiones de sus congéneres. El animal, de nombre "Aguirre", fue sacrificado el día exacto que cumplió un año, día
que no será olvidado ya que figurará en el Guinness de los récords.
El ternero "Aguirre" que con un año realizó la proeza de alcanzar los 750 kilos de peso en vivo y 450 en canal, pasó por el cuchillo del matarife y está ya hecho filetes, listo para ser consumido. Aguirre se convertirá en 1.800 filetes, mucha carne de guisar, dos solomillos, una larga cinta de chuletas, un buen hígado y dos potentes
criadillas.
Además de proporcionar todos estos deliciosos manjares sus espectaculares dimensiones le van a hacer famoso, una vez que el matarife lo haya pasado a cuchillo, ya que su cabeza será conservada como recuerdo. Este ejemplar -hijo de vaca de la raza austríaca flewisch
cruzada por
inseminación artificial con el toro charolés Aguirre- pertenece a la
explotación ganadera de Antonio Urkia y su madre, Xalbadora Atxaga, y ha
crecido con alimentación natural a base de leche, harina de maíz y de cebada
y algo de hierba. Él es la demostración palpable de que con buenas razas y
alimentos sanos, sin aditivos ni químicos engordantes, se pueden conseguir excelentes piezas de carne.