El queso manchego es, sin duda, el más famoso de España. Se consume desde tiempos inmemoriales en toda la comarca manchega. Esto ha hecho posible que hoy en día se desarrolle una importante industria quesera, que mantiene la producción artesanal del queso.
El Queso Manchego es un queso graso, elaborado exclusivamente con leche cruda o pasteurizada de oveja manchega.
Su forma es cilíndrica. La corteza, de color amarillo o marrón oscuro, presenta, en los laterales, el diseño característico de los pliegues del esparto y, en la parte superior e inferior, la llamada "flor" o marca de las lamas de la prensa de madera.
Su textura es compacta, densa y untuosa, su color varía entre el blanco y el marfil amarillento, y su sabor es intenso, peculiar y ligeramente salado. Posee Denominación de Origen desde 1991 y cada queso debe identificarse por una de sus caras planas con una placa de caseína numerada.