Restaurante Lobo, Nuevo Espacio Gastronómico en la Pinilla (Estación de Esqui)

CRITICA.- Visito el Restaurante LOBO porque varios amigos me hablan de su éxito, me desplazo más de una hora de Madrid, confiado que voy a disfrutar.  SORPRESA, llegamos a una hora temprana, pero ya habia animación en la barra y llegando comensales, nos proponen probar varios platos y aceptamos hacer un menú largo y estrecho que nos fue llevando por los placeres que se desprende de una tecnica refinada para elaborar los platos, croquetas con una textura y crujiente extraordinarios que escondían unos sabores muy puros de Lechazo y de chorizo ahumado. Alcachofas con huevos pochados y papada, una sublime crema de manchego y setas exclusivas de esta sala, mollejas para llorar, una manita de cerdo deshuesada con gambas y un fume de sus cabezas que ponía los pelos de punta, Taco de jabalí con mucho secreto que te invito a descubrir y como especialista en Brasas y parrilla, pudimos comprobar como llevan las piezas al punto ideal demostrando la maestría de su personal de cocina. Postres para presumir de haberlos probado (ojo a la torrija) y una carta de vinos bien estructyurada, algo corta pero con muchpo criterio. Pero creo que es necesario que diga que el servicio es excepcional, hoy es dificil encontrar personal que no abandone la sonrisa ni su voluntad de hacer muy agradable tu disfrute gastronómico. Yo ya amenacé que volvería, porque el tartar sobre tuetano que me recomendaron ya no me cabía. Gracias a Daniel y a todo su equipo.Volviendo al inicio, debo recomendar el lugar y asegurarles que merece la pena el desplazamiento

CRÓNICA.- Para lograr matices únicos en sus platos a la brasa, en el restaurante Lobo emplean diferentes tipos de carbón y maderas, como: el carbón vegetal de encina y quebracho, o maderas de roble, cerezo, manzano y nogal. Cada tipo de carbón y madera aporta distintos aromas y sabores a la carne, creando una experiencia culinaria única y deliciosa.

Al frente de los fogones, el gallego y jefe de cocina del restaurante, Daniel Pedrosa, con una importante trayectoria profesional que comenzó su andadura en la Escuela de Hostelería El Cenador de Salvador de Moralzarzal, y continuó nutriéndose en establecimientos galardonados con estrellas Michelin de España, y en los restaurantes de Ramón Freixá de Colombia, entre otros de América Latina. Desde 2017 regresó a España para abrir su propio restaurante Mesta y actualmente es, en el restaurante Lobo, donde sigue sorprendiendo a los comensales con su excepcional habilidad para mezclar sabores y técnicas de todo el mundo, mientras se mantiene fiel a sus raíces y a su pasión por los productos locales y de temporada.

Para Daniel: “Cada plato es una obra maestra creada con productos de mercado y de temporada, cuidadosamente seleccionados de proveedores locales comprometidos con la calidad y la sostenibilidad. Una carta viva y abierta, en constante cambio, para ofrecer siempre sabores genuinos y originales en su momento óptimo”.

Lobo ofrece una selecta carta con una cuidada selección de platos, donde encontramos: tacos de jabalí a baja temperatura, pimientos al carbón con emulsión de ajada, o croquetas cremosas de lechazo asado al sarmiento entre los entrantes; y de principales, lechazo de Riaza asado en horno de leña, tomahawk de ternera angus, lomo alto de raza frisona, o fideuá negra con gulas y huevo poché, por citar algunos. De postre, tarta de queso al horno, torrija de pan brioche caramelizada y rellena de cremoso avellana, y el trío de cremosos de chocolate sobre crumble de almendras, entre otros.

Y si se quiere hacer un recorrido por la cocina de Pedrosa, dejarse seducir por su menú degustación a un precio cerrado de 60 € y que incluye cinco platos y un postre.

Traspasar las puertas de Lobo es adentrarse en el corazón de la Sierra de Ayllón, un espacio, obra del estudio de arquitectura Néstor Marcos Architecture, inspirado por el entorno montañoso y la esencia de la estación de esquí, fusionando elementos naturales y modernos. Con la utilización de maderas autóctonas y piedras locales, ha logrado un ambiente acogedor y sofisticado que refleja la naturaleza circundante. El mobiliario y la iluminación acentúan la calidez y elegancia, mientras que las ventanas panorámicas permiten a los comensales disfrutar de impresionantes vistas de las montañas.

El restaurante Lobo (Estación de esquí La Pinilla, s/n. Cerezo de Arriba (Segovia)) abre jueves, viernes y sábados de 12:00 a 24:00 horas; y domingos de 12:00 a 17:00 horas. El precio medio es de 45 €. Se puede ampliar información y reservas en el teléfono 692 46 44 74 y a través de su página web www.restaurantelobo.es