CRÓNICA.- Aunque disputan su origen Grecia e Italia, la lasaña está formada por capas de pasta y relleno de diferentes ingredientes como carnes, pollo, pescados o vegetales. Existen muchas formas de confeccionar este plato de fama mundial, pero la versión clásica y tradicional consiste en láminas de pasta con salsa boloñesa, preparada con carne picada, tomates frescos, vegetales, bechamel y queso gratinado.
Y es justamente así como la elaboran en el restaurante Flavia, ya todo un referente de la cocina italiana de la capital, de una excelente calidad y sabor.
¿Cuál es su secreto? Elaboran las lasañas de cabo a rabo en casa y de manera artesana, y utilizando ingredientes frescos de máxima calidad. Flavia, deleita así a sus comensales con un plato que, si prueban, se convierte en favorito, repitiendo en su siguiente visita.
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