El pasado mes de Diciembre el Instituto para la Calidad Turística Española otorgo los sellos Q de Calidad Turística del 2010 al sector, entre los premiados con esta distinción esta el restaurante lucense de cocina creativa Paprica de Alvaro Villasante. La distinción de Paprica es destacable porque lo convierte en el único restaurante de la provincia que cuenta con esta certificación.
Álvaro a sus 32 años y desde hace cuatro chef y propietario de Paprica es un cocinero que ha desarrollado su trayectoria culinaria al lado de grandes de la cocina como Sergi Arola y Ángel Palacios, en La Broche (Miami); Gonzalo Tamanes, en el Rincón de Gonzalo (Tenerife); Ramón Freixa, en Racó d’en Freixa (Barcelona), y Oscar Sabate, en Eth Taro (Val d’Arán), aunque sus primeros pasos los inicio en su tierra en el Mesón Colón (Nadela, Lugo) y posteriormente en Val d’Arán en Lleida en el Parador Gaspar de Portolá.
En el corazón de la ciudad amurallada desde septiembre de 2007 se encuentra su restaurante Paprica, allí Álvaro desarrolla una cocina creativa con guiños a la tierra y buena técnica en un entorno muy agradable y moderno que cuenta con una pequeña huerta de donde obtiene algunos de los productos ecológicos utilizados en su cocina. Hace algunos meses visite por segunda vez su restaurante y si ya en la primera ocasión me llamó mucho la atención su trabajo, en esta ultima salí muy satisfecho del excelente trabajo que hace Álvaro día a día en Paprica.
Nuestro menú aquel día tras un aperitivo de lascas de bacalao con verdura escabechada comenzó con un cebiche de judías habas tiernas de casa y pulpo braseado, otra forma de consumir este producto tan representativo como es el pulpo y que aunque personalmente no este muy acostumbrado creo que es una forma interesante de trabajar el producto con resultados muy buenos. Después una espectacular ensalada templada de escabechados de temporada, contando que los escabeches es una de mis debilidades este plato me encantó.
El tercer plato un mar y montaña muy potente formado por un lomo de bacalao con espuma de coliflor y civet de liebre. En conjunto un plato muy rico con muy buena combinación de sabores. Para terminar Álvaro nos puso un lechón asado al momento, con chalotas glaseadas acompañado de algo menos común en este tipo de carne como son los fideos de arroz con soja. El postre fue una versión de la tarta de santiago. A estos se unen otros platos como su foie sobre pan casero acompañado de dados de pera y manzana, atún rojo con tortilla de alcaparras o su postre de yogur con velo de albahaca y granizado de manzana.
Para Álvaro con el que coincidí como compañero de jurado en la II edición del concurso de tapas de Monforte de Lemos es una satisfacción lograr por primera vez la Q de Calidad Turística, y con ella subirse al carro de los restauradores que garantizan la calidad de los servicios y de los productos con gran profesionalidad, algo cada vez mas importante en estos tiempos. Este reconocimiento se suma a otros como el premio a la mejor tapa creativa 2009 o el 2º premio de tapa creativa 2010 ambos en el concurso de tapas de Lugo.
Sin duda Paprica se convierte aún más desde este momento en una visita obligada en la provincia de Lugo para los amantes de la buena gastronomía y de la cocina creativa.
Felicidades Álvaro.