€�Alta Expresión’, el Queso de Edición Limitada 2017

Dehesa de Los Llanos lanza un queso, en formato de Edición Limitada, llamado “Alta Expresión”. Sus características son únicas: más de 18 meses de curación, picor atenuado, olor limpio y notas lácteas.

Vamos, un queso de sabores y aromas pronunciados y un largo retrogusto. Esto es gracias a su larga maduración, que aporta matices hasta ahora desconocidos con una textura laminar y firmeza.

Está elaborados solamente con la mejor leche cruda de sus 5.500 ovejas de pura raza manchega, cuajo y sal. Se preparan cuidadosamente en su propia quesería bajo un proceso de maduración, donde la tecnología interviene para que el queso artesano - sabor, aroma, textura, nutrición – tenga y salga con el rigor de los procedimientos que garantizan su calidad y sanidad.

Dehesa de Los Llanos

Es una de las queserías más antiguas de España, pues desde el S. XVII, producen todos los ingredientes necesarios para elaborar el mejor queso del mundo, según el World Cheese Awards en el año 2012.

Contiene una cabaña propia de 5.500 ovejas de pura raza manchega, productoras de una leche única, por las condiciones en las que viven y, principalmente, por su alimentación procedente de forrajes, pastos y aromáticas cultivados en la propia finca, dan lugar a una leche a la carta.

Los quesos están elaborados sin pasteurizar. Y, a diferencia de la mayoría de etiquetas con lisozima de huevo y cloruro cálcico entre otros añadidos, los únicos ingredientes del queso Dehesa de Los Llanos son la mejor leche cruda, cuajo y sal.

También destaca porque fue la primera explotación de ganado ovino de España que introdujo la identificación electrónica de ovejas. Los Quesos Manchegos D.O Dehesa de los Llanos son actualmente tres: Semicurado, con leche cruda propia, de curación mínima de 3 meses, tiene textura cremosa y un sabor agradable y elegante.

El Curado, elaborado con leche cruda propia, y una curación mínima de 6 meses. Tiene un sabor aromático e intenso. Mientras que el Gran Reserva, elaborado con leche cruda propia, tiene una curación entre 9 y 14 meses. Destaca por su textura escamosa y un sabor intenso.