Buen Lugar para Tapear con Sabor Asturiano la Charca "Prueba sus Cachopos"

Ubicada en pleno barrio de Argüelles, junto a la Plaza de España, La Charca es una taberna actualizada donde se puede disfrutar del picoteo y el cañeo en su barra y de la cocina española de siempre con propuestas sencillas y guiños a la cocina asturiana.

Mi visita fue de lo más divertida. Cachopo, fue lo principal, quería conocer su propuesta en estos días del Cachopo por 25 euros Menú para dos.  Entrante, Bebida y CACHOPO, lo pongo en mayúsculas no por su tamaño (importante) que ya se le supone. Mayúsculas por su calidad. Crujiente como hacía tiempo que no probaba y tierno y jugoso como demuestra una cuidada selección de la materia prima. El vino que incluye este menú, muy digno y con armonización perfecta.

Una taberna que ya me ha conquistado para volver.

 Las croquetas de La Charca, los fritos de pixin, la fabada asturiana como Dios manda, el cachopo al estilo de Allande y el arroz con leche requemado son sólo algunas de sus especialidades

Madrid, marzo de 2017.- Ubicada en el barrio de Argüelles, junto a la concurrida Plaza de España y el turístico Templo de Debod, La Charca es el último proyecto con el sello del hostelero Manuel Fernández, un empresario asturiano de nacimiento y madrileño de adopción que lleva toda una vida dedicada al mundo de la hostelería. Un espacio consagrado al cañeo y al picoteo en el que también se puede disfrutar de una cocina tradicional española honesta, sin florituras y con guiños a la cocina asturiana.

SABORES DE SIEMPRE Y GUIÑOS ASTURIANOS

En este espacio además de acompañar el vino o la caña del aperitivo con las croquetas de La Charca, los fritos de pixin o las bolas de queso de cabra con cebolla caramelizada, se pueden degustar los sabores de siempre como el cachopo asturiano clásico hecho aquí con solomillo de ternera de D.O. Asturiana y al estilo de Allande (relleno de lacón cocido y tres tipos de quesos asturianos, secreto de la casa), la fabada asturianacomo Dios manda, el rape asado con chipirón encebollado y su tinta, el arroz con bogavante y el risotto de hongos con foie braseado. Y como especialidad de la casa destaca un postre de toda la vida: el arroz con leche requemado o no.

Para poner en marcha este proyecto, Manolo ha reformado por completo un local con solera de la céntrica calle Juan Álvarez de Mendizábal y ha creado una taberna actualizada donde da salida a una propuesta enfocada al día a día y más informal que la que ofrece en sus tres establecimientos ya consolidados en la zona de Chamartín (Vigamar’s –la primera casa de comidas asturiana que abrió en 1981-, El Hórreo Asturiano –un concepto más cercano a la sidrería tradional con carnes a la parrilla- y Asgaya - la evolución y la revolución de la cocina asturiana en la capital-).

En la Charca, nada más entrar, el cliente encuentra una larga barra que cambia de color según las horas y una zona de mesas altas donde tomar unas cañas y disfrutar del aperitivo. Al fondo, el local alberga un patio interior decorado con vegetación y vigas de madera a la vista, mesas bajas de madera sin tratar y sillas en diferentes colores que funciona como la sala del restaurante. Un espacio que cuenta con una bodega hecha a medida y que resulta más cálido y acogedor para disfrutar pausadamente de sus platos.

En definitiva, por su oferta que se adapta a cada momento del día, su céntrica ubicación y su horario ininterrumpido, esta taberna actual se convierte en el punto de encuentro perfecto para hacer un alto en el camino en una jornada de compras o tomarse un respiro mientras se hace turismo ya que aquí se puede desde desayunar, tomar el aperitivo y comer hasta merendar, cenar o disfrutar de las primeras copas de la noche.

Dirección:Juan Álvarez de Mendizábal, 7

Precio medio: 30 euros/persona

Menú ejecutivo: 14 €

Teléfono:91 547 28 94