Rápida Actuación ante los Primeros Casos de la Enfermedad de Schmallenberg en Rumiantes Córdoba | Sanidad Y Consumo España

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(Mercedes Palmer) Los eficaces estudios que está llevando a cabo la comunidad científica europea alrededor de la enfermedad de Schmallenberg, la política de información pública y rápida comunicación entre los países europeos, el trabajo de divulgación que puso en marcha el Ministerio de Agricultura de España, la importantísima colaboración informativa del sector ganadero español -al que la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) ha solicitado que prosiga su buena labor de transparencia informativa como herramienta imprescindible para limitar cualquier posible consecuencia-, y el apoyo de la Junta de Andalucía han permitido la rápida detección y eficaz difusión de las herramientas de control frente a los primeros casos de la enfermedad de Schmallenberg (afecta a rumiantes) en Córdoba con el objetivo de limitar al máximo las posibles repercusiones

De hecho, se esperaba la llegada inminente del virus a España debido a que ya se habían producido en otros países (Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Reino Unido, Francia e Italia)

Hemos realizado un resumen de lo que las autoridades oficiales y organismos relacionados han publicado hasta ahora alrededor de este tema

Infección del animal, y transmisión del virus a humanos

El Ministerio español ha apuntado que, al igual que otros virus del género Orthobunyavirus, el virus de Schmallenberg parece que se transmite por mosquitos del género Culicoides, vectores (vectores son las especies que originan el contagio) por otra parte, ampliamente distribuidos por las regiones afectadas como así se demostró con la epidemia del serotipo 8 de la lengua azul

Los virus del género Orthobunyavirus también han demostrado su capacidad de transmisión vertical a través de la placenta, por lo que no se puede descartar este mecanismo de transmisión para el virus de Schmallenberg. Aunque parece muy poco probable, tampoco se ha podido eliminar la posibilidad de transmisión directa entre los animales

La transmisión producida por el consumo productos de origen animal, tales como la carne o la leche, se considera muy improbable

Vía Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente España

Tanto en las noticias del Ministerio, como en las declaraciones del catedrático José Manuel Sánchez Vizcaíno, se subraya que la presencia del virus en el ganado bovino, ovino o caprino no afecta a los seres humanos

El presidente del Código Sanitario para los Animales Terrestres de la OIE, Alex Thiermann, que ha participado en el III Encuentro Internacional en Sanidad Animal y Seguridad Alimentaria que ha tenido lugar el 15 de marzo de 2012 en Córdoba ha declarado que, a pesar de que no hay riesgo para la salud pública u otras especies, las conclusiones sobre las que están trabajando se basan en el conocimiento de otro virus similar, el de la lengua azul. Asimismo, se indica en la documentación de la OIE indicando que la posibilidad de transmisión a humanos a través del consumo de carne y leche de animales afectados es insignificante y, con respecto a otros canales (semen, parto, etc), y siguiendo con la analogía con otros virus similares, el contagio entre animales (de animales enfermos a sanos, o de sanos a sanos), parece ofrecer características parecidas o inferiores al virus de la lengua azul u otros similares, concluyendo por tanto que prosigue el estudio intensivo dado que la enfermedad ha sido descubierta hace poco

Incidencia en Andalucía

Los servicios veterinarios de la Comunidad Autónoma de Andalucía, han confirmado la presencia de la enfermedad de Schmallenberg en una explotación mixta de ganado ovino y caprino en la comarca Hinojosa del Duque en la provincia de Córdoba

En la explotación afectada se sospechó la presencia de la enfermedad el pasado martes 6 de marzo debido a la detección de un caso de un ovino que abortó a término un cordero que sufría una malformación congénita compatible con esta enfermedad. Informados los servicios veterinarios oficiales, se tomaron muestras que fueron analizadas por el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid), del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y los análisis han confirmado el resultado positivo 

Esta detección ha sido posible gracias al Plan de Vigilancia que se empezó a aplicar en enero pasado como medida de precaución ante la diseminación de esta enfermedad por varios países europeos

Vía Junta de Andalucía 

Enfermedad de Schmallenberg

Durante el verano del 2011, los servicios veterinarios del Estado de Renania del Norte-Westfalia en Alemania investigaron numerosos casos clínicos de lo que en un primer momento pensaron que era una variante no conocida del virus de la lengua azul. Los principales síntomas que presentaban los animales afectados se caracterizaban por ser muy inespecíficos como hipertermia, pérdida de la condición corporal, diarrea, anorexia, disminución de la producción láctea. Este cuadro se resolvía por sí mismo al cabo de dos o tres días

De manera coincidente en el tiempo, los servicios veterinarios holandeses describieron cuadros clínicos similares en explotaciones bovinas situadas en la parte oriental del país, región limítrofe con el estado alemán afectado

Tras descartar por métodos laboratoriales la presencia del virus lengua azul, diarrea vírica bovina y otros pestivirus, herpesvirus, enfermedad hemorrágica epizoótica y fiebre del valle del Rift, recurrieron a métodos metagenómicos para determinar la presencia de material genético de agentes patógenos. Este análisis reveló la presencia de secuencias genómicas víricas que indicaban la presencia de un nuevo virus no identificado hasta la fecha que se incluyó taxonómicamente en el género Orthobunyavirus (familia Bunyaviridae). Este nuevo virus fue denominado ‘virus de Schmallenberg’ (en adelante SBV) debido a la ciudad de procedencia de los primeros animales afectados

Desde su detección en Alemania, el virus ha sido detectado hasta febrero de 2012 en los siguientes estados miembros: Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Reino Unido, Francia e Italia

Repercusión económica

Se trata de una enfermedad que, conforme a los datos disponibles, no parece tener una repercusión económica directa importante en la explotación, dado que los animales adultos infectados se recuperan rápidamente. Sin embargo, la enfermedad sí que puede generar problemas para el sector por las posibles repercusiones que pueda tener para el comercio exterior de animales vivos y de sus productos Desde el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente se está trabajando para minimizar las potenciales repercusiones en el comercio internacional

Vía Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente España

Política de control

Las medidas de prevención y lucha contra la enfermedad que se podrán adoptar en España se enmarcan en la política de la Unión Europea (UE) en materia de sanidad animal. El ámbito legal que define todas las actuaciones de lucha frente a la SBV en España se haya recogido en la Ley 8/2003, de Sanidad Animal, de 24 de abril según la cual cualquier sospecha deberá ser comunicada con carácter de urgencia a los servicios veterinarios oficiales (SVO) de la comunidad autónoma, tal y como se establece en el artículo 5. Una vez comunicada la sospecha, se podrán tomar medidas de salvaguardia para prevenir su difusión (artículo 8)

La infección por el SBV no es una enfermedad incluida en la lista de declaración obligatoria de la OIE, aunque los de países afectados inicialmente por la enfermedad han notificado la aparición del virus en su territorio a esta organización

La lucha contra la enfermedad está basada en las siguientes actuaciones:

Rápida notificación a las autoridades competentes de todos los casos declarados sospechosos (consúltese anexo II para ver definición de la sospecha)

Puesta en marcha de investigaciones clínicas, epidemiológicas y entomológicas en torno a los focos

Medidas de control del vector en el medio ambiente, en los alojamientos de los animales y en los propios animales, mediante el uso de desinsectantes y repelentes

Se debe remarcar que, debido a las características epidemiológicas de la enfermedad y su modo de transmisión, no está justificado el sacrificio de los animales afectados ni la restricción de movimientos de animales procedentes de la explotación o explotaciones afectadas

En la actualidad no existe ninguna vacuna disponible frente al virus, si bien está en fase de desarrollo. La existencia de vacunas comercialmente disponibles frente al virus permitiría contar en el futuro con una herramienta que podría ser de utilidad en la lucha frente al virus. No obstante, al tratarse de un agente que previsiblemente induce una fuerte inmunidad natural y una baja mortalidad en las explotaciones afectadas, la evaluación de la relación coste-beneficio sería un paso previo imprescindible a una campaña vacunación a gran escala

Manual práctico de operaciones en la lucha contra la enfermedad de Schmallenberg del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente

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