Cocina de la Concordia: Jornadas Gastronómicas Víctor Gloger Y Samuel Perea | Menús, Jornadas Gastronómicas, Rutas Y Temáticos España

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Prólogo

Hay una puerta en el desierto que se abre y se cierra.

Puedes entrar y salir, no conduce a ninguna parte.

A cada lado se agolpa la muchedumbre ansiosa por pasar al otro lado.

Se cruzan en la puerta, y sin hablarse se miran como enemigos.

(Los hombres nunca han podido expresar más de lo que sienten).

La Red de Juderías de España dentro de sus actividades culturales para 2013, ha programado desde el 12 hasta el 15 de marzo y bajo el lema La Cocina de la Concordia, la intervención de los cocineros Víctor Gloger y Samuel Perea, embajadores de dos de las culturas gastronómicas del Mediterráneo. Víctor y Samuel se darán  cita en Jaén, Lucena, Sevilla,  Córdoba y Málaga para cocinar juntos. El objetivo es destacar así el papel determinante que la gastronomía mediterránea ha desempeñado en la convivencia y el desarrollo de relaciones pacíficas entre los pueblos situados en torno al Mare Nostrum

En concreto, se celebrará en el Club Gastronómico Km.0 (Málaga) el sábado día 16 de marzo de 2013 patrocinado por Cocina por la Paz y la Red de Juderías de España – Caminos de Sefarad

Menú degustación

Brindis por la paz con aceite de oliva virgen extra

Molturado de aceitunas verdes de Álora (Samuel Perea) (ver la receta)

Tortillitas de couscous con chipirón y gambas (Samuel Perea) (ver la receta)

Humus y costillitas de chivo lechal malagueño (Víctor Gloger) (ver la receta)

Torrijas de pan del shabat (Jalá) con clavo y jengibre (Antonio García “El Colmenero”)

Aceite, pan y vino

Pan cristiano de hogaza *

 Blanco seco Moscatel de Alejandría  2012*

Tinto Syrah 2011*

Aceite ecológico frutado suave (arbequina/hojiblanca).*

*El pan y las torrijas son gentileza de Antonio García “El Colmenero”

*Los Vinos y el aceite de oliva son gentileza de Samuel Perea

Con esta muestra se quiere focalizar la importancia de la cultura alimentaria mediterránea como vehículo de unión entre los pueblos, sumar esfuerzos por la paz y poner de manifiesto que también desde uno de los aspectos básicos y quizás más desapercibidos de la vida cotidiana, como es la gastronomía y la cocina, son muchas más las coincidencias y armonías que las diferencias entre las distintas culturas.

El acervo cultural del Mediterráneo no se agota en el arte, la literatura el teatro o la música, sino que también la creatividad de sus cocineros y cocineras, sus tradiciones culinarias ancestrales, la naturaleza común de sus materias primas y sus vinos constituyen una fuente de incalculable riqueza, cuya importancia ha sido reconocida como modelo por la UNESCO. Un patrimonio que, desde hace más de dos mil años, une a todos estos países y culturas, regula sus relaciones comerciales, facilita su tolerancia y desarrolla un flujo de ideas, costumbres alimenticias y gustos comunes, adaptados magistralmente a las peculiaridades de cada uno.

Víctor Gloger y Samuel Perea componen e interpretan algunos de esos platos con el máximo respeto por nuestros antepasados. Hoy quieren compartir los recuerdos de la cocina de sus orígenes, reflejada en unas sencillas recetas, algunas muy antiguas, y otras, actualizadas e interpretadas siguiendo su peculiar obsesión por la búsqueda de sabores que se mantienen intactos en  su memoria.

Víctor Gloger, Fundador de Cocina por la Paz. Restaurante Chloélys (Tel Aviv, Israel)

Según toda la crítica gastronómica, el restaurante Chloélys es uno de los más impresionantes de Israel. Su chef, Víctor Gloger, judío de origen argentino, ha conseguido a partir de materia prima de primera calidad, innovar y adaptar de forma creativa y magistral muchos platos de la cocina tradicional, y aportar un aire de modernidad a la cocina que tradicionalmente se hacía en Israel.

El local es espacioso, de ambiente elegante y refinado. El suelo de madera del restaurante se importó de Brasil, sus ladrillos de Bélgica y, en su bodega reposan más de 7.000 botellas de vino de todo el mundo, con una sección especial dedicada a los vinos de la zona. Es el único restaurante israelí que ha conseguido la distinción de Excelencia de WineSpectator's. Su carta es un mosaico de la cocina mediterránea, y destacan especialmente sus fantásticas elaboraciones a partir de los excelentes pescados y los mariscos de esta zona.

El lema de su cocina es simplicidad. Sus recetas son sencillas e intensas. Entre sus platos más famosos, destacan el tártaro de atún, el atún rojo chamuscado con wasabi, el hígado del pato en brioche, la muselina de vieiras con langostino y el risotto con langosta.

Samuel Perea, Fundador de Cocina por la Paz

Si hay un cocinero que haya entendido e integrado por convicción, compromiso y principios la alimentación mediterránea en su quehacer culinario se llama Samuel Perea. Su pasión por la cultura gastronómica le hizo adquirir conocimientos de cocina en los múltiples países que visitaba, sintiéndose atraído especialmente por la cultura mediterránea y en especial la malagueña, la propia, llevándole a crear lo que el mismo califica para definirla como “cocina en origen”.

Desde este concepto desarrolla un trabajo impecable de recuperación y actualización creativa del extenso recetario de la cocina malagueña y mediterránea. En 2011 fue distinguido con “tres soperas” en Lo Mejor de la Gastronomía Española.

Entre sus recetas, encontramos platos sorprendentes como el molturado de aceituna, tartar de salchichón de Málaga, ajoblanco de altramuces, porra de tomate y fresa, boquerones en escabeche de naranjas cachorreñas, tártaro de atún rojo del estrecho con picatostes, arroces, bacalao, paletilla de chivo lechal malagueño y un largo etc., que hacen de su recetario una autentica fuente de inspiración para los sentidos. Su cocina está construida, según él mismo explica, “a partir de una sencilla línea de trabajo, con elementos propios y coincidentes, de la tierra y el mar, buscando un eje imaginario que atraviesa el Mediterráneo de parte a parte, desde Beirut a Yafo, o Alejandría o Benghazi, Orán, Tetuán, Málaga, Alicante, Rosas, Marsella, Nápoles, Palermo o la isla de Chipre.

Todo bañado con un insuperable aceite de oliva virgen, mojando con buen pan y bebiendo un excelente vino. Trabajó en El Cairo, en Argelia, en Jerusalén… Está vinculado especialmente con Oriente Medio, cada año organiza un acto en la ciudad de Belén motivado por su espíritu conciliador en el conflicto palestino-israelí; lo que le ha llevado a participar en numerosos reportajes para la televisión en los desiertos de Judea y Negev

Nota de Samuel Perea

Todas nuestras manifestaciones, ideas, opiniones o desarrollo de las mismas que expresamos,  son interpretaciones libres y personales sin menoscabo de las opiniones de otros, que por el respeto que nos merecen no hacemos las nuestras mejores sino distintas. Que no pretenden sentar cátedra, ni pertenecen a ninguna corriente de pensamiento y tampoco las tomen como únicas ni últimas

Nuestra intención en todo caso y en este en particular, es la de compartir aquella ideas propias o ajenas con todos ustedes, y pasar un rato agradable

Como organización sin ánimo de lucro, nos tomamos la libertad de trabajar en favor de la paz sin sentirnos obligados a comprometernos con nadie

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