Japan Restaurant Week

La iniciativa parte de un portal especializado en esta gastronomía, “Adictos a comer japonés” y de una web de ocio “Atrápalo”.

Participan en esta primera edición, 32 restaurantes repartidos entre estas dos ciudades, que durante una semana ofrecerán menús de calidad a un precio de 25 euros.

Hace ya más de 35 años que se abrió primer restaurante japonés en España y desde entonces han sido imparables el ascenso y la acogida de esta cocina en nuestro país, cambiando los hábitos culinarios de los españoles.

La Japan Restaurant Week comienza a la vez que las celebraciones del Año Dual España-Japón, que conmemora los 400 años de relaciones entre ambos países.

La gastronomía es una puerta al conocimiento de la cultura de otro país, en este caso un país con tradiciones milenarias. Por ello, ha sido determinante hacer coincidir este evento gastronómico con las celebraciones antes citadas.

Así mismo en las redes sociales, se ofrecerán amplios contenidos relacionados con la gastronomía japonesa.

En Madrid el interés por la comida nipona es grande y va en aumento, por lo que han proliferado multitud de restaurantes sobre todo en la zona de Chamberí. Entre la Castellana, Arguelles y Chueca, donde incluso hay una calle, Reina que es totalmente japonesa, se respiran los aromas del sushi, miso, tempura, edamame, tepanyaki…, de los innumerables locales asiáticos de la zona. Desde restaurantes de lujo, bares informales o tiendas delicatesen.

Se puede decir que es precisamente en Chamberí, donde empezó la fiebre madrileña por esta cocina. Los primeros fueron restaurantes japoneses puros y actualmente la mezcla y la fusión de cocinas predomina en el panorama madrileño.

Para algunos expertos, esto es un riesgo, aunar sabores y productos tan dispares es muy difícil, pero siempre hay que apostar por la innovación, en esto se basa la restauración y además es el tiempo el que dirá quién prevalece y quién no. Las fusiones con cocina latina, china, coreana e incluso castiza, atraen en sí mismas a un público ávido de novedades, por lo que no deben despreciarse.

En Chamberí se mezclan el lujo y el barrio popular, hay muchas oficinas y embajadas que conllevan un público, que busca comer rápido, sano y elegante. Por esto es por lo que surgió y se desarrolló  en este barrio la cocina japonesa, más que en otros. Y es aquí donde se concentra la oferta de los locales de categoría, como Miyama Castellana, que suelen frecuentar los japoneses afincados en España.

El chef del Miyama, Hiroshi Kobayashi, realiza el “caldo dashi con alga konbu y katsuobushi”, utilizando escamas de atún verdaderas, mientras la mayoría utilizan polvos de bote.

El 90% de los que se anuncian como japoneses en Madrid, no lo son, esta es la realidad. Aunque la competencia siempre anima el mercado.

Pero no nos engañemos, la comida japonesa de calidad hay que pagarla. No se puede ofrecer pescado crudo, si la calidad no es excelente. Este es el caso de otro local emblemático, el Sushi 99, en la calle Ponzano.

Aunque también existe una comida japonesa barata, saludable y gourmet, este es el caso del okonomiyaki, plato popular de la región de Osaka, consiste en una crêpe de verduras, carne, pescado o cualquier otro ingrediente que el comensal quiera añadir.

De este estilo tenemos el Hanakura al lado de la plaza de Olavide, donde Keigo Onoda elabora sus platoa al estilo de las izakayas (tabernas) de su país.

En el Centro Cultural Fundación Japón, se difunde toda la cultura del país del sol naciente, entre ofertas variadas nos quedamos con las gastronómicas, los talleres de sushi o de comida decorativa (kyaraben), son un ejemplo.

Entre las tiendas de productos Daisuki, inaugurada a principios de este año, vende ingredientes, utensilios y hasta libros de cocina. Tiene una pequeña barra donde realizan talleres prácticos.

Está impulsada por españoles amantes de la cocina japonesa, que sobre todo pretenden la difusión de esta milenaria gastronomía, que no en vano ha proliferado, por sus cualidades de excelencia  y bondades para la salud.